Echaron a un policía que había sido detenido con un vehículo robado

Finalmente, la Inspección General de Seguridad echó de la fuerza policial a un efectivo que sumaba varias causas en su haber, entre ellas había sido detenido manejando una camioneta robada por las calles del barrio Cívico de la Ciudad de Mendoza.

La decisión quedó formalizada mediante una resolución firmada el 19 de diciembre de 2025, luego de que se acreditara que el efectivo abandonó su servicio sin causa justificada y sin dar aviso a las autoridades correspondientes.

El caso se originó a partir de una investigación impulsada por la Inspección General de Seguridad, que analizó la conducta del agente luego de que este dejara de presentarse a cumplir funciones tras finalizar una licencia médica otorgada en noviembre de 2022. Según consta en las actuaciones, una vez vencido ese período, el policía no volvió a su puesto de trabajo ni respondió a las citaciones realizadas por el área de Sanidad Policial, situación que encendió las alertas internas y derivó en la apertura del sumario.

Durante el proceso administrativo se recolectaron pruebas, se tomaron informes y se realizaron distintas instancias formales, incluida la convocatoria a una declaración indagatoria. Sin embargo, el agente no compareció, no presentó descargos ni ofreció pruebas en su defensa. Con el avance de la investigación, los organismos intervinientes coincidieron en que existían elementos suficientes para considerar acreditada la falta, calificada como abandono voluntario y malicioso del servicio de seguridad. 

Sus causas

A pesar de ser despedido por "Abandono de servicio", el ahora ex oficial había sido detenido en 2024 conduciendo una Volkswagen Amarok robada por las calles del barrio Cívico. Al ser detenido en un control policial, los agentes indentificaron el vehículo, el cual tenía una patente falsa.

Previamente, en 2022, el policía mantuvo un altercado con parte de la comunidad gitana que está asentada en la lateral del Acceso Sur, en Dorrego.