El joven de 28 años, acusado de coautor del crimen de las tres chicas en Florencio Varela, llegará al país en las próximas horas.

Matías Ozorio, la mano derecha de "Pequeño J", fue trasladado a la Argentina

Editó: Tamara SbardoliniJueves2 Oct 2025

Matías Agustín Ozorio, el joven de 28 años acusado de ser la mano derecha de Tony Janzen Valverde Victoriano, alias "Pequeño J", presunto ideólogo del triple crimen de Florencio Varela, fue expulsado de Perú y trasladado en un avión a la Argentina este jueves.

Con un chaleco antibalas, esposado de pies y manos, se subió al avión pasadas las 17:30 y volará durante aproximadamente cinco horas junto a siete efectivos de la Policía Federal de la División Investigación Federal de Fugitivos y Extradiciones, más tres agentes de la Policía Bonaerense.

Leer también:"No puedo más": el desgarrador testimonio de la madre de Lara Gutiérrez

También viaja el Comisario Mayor Marcelo Chiappero, Director General de Cooperación Policial Internacional (Jefe De Interpol en Buenos Aires) de la Policía Federal, además de un médico.

Tras una escala en la provincia de Salta, se espera que la aeronave arribe a Buenos Aires cerca las 23 de este jueves.

Ozorio se encontraba en la mira de las autoridades desde que avanzaron las investigaciones sobre el crimen. Según las sospechas, habría estado presente en la vivienda donde ocurrió el asesinato de las tres jóvenes. Su fuga lo llevó a cruzar la frontera y esconderse en Perú, donde finalmente fue localizado y detenido.

Leer más: Crimen del barrio Unimev: un detenido tras la confesión de un adolescente

El perfil de Ozorio refleja una historia marcada por decisiones que lo alejaron de una vida estable. Durante la pandemia, trabajó en el Hospital Italiano, donde, según conocidos, recibió un buen salario. Sin embargo, se habría desvinculado del empleo de manera voluntaria para cobrar una indemnización, la cual invirtió en un esquema fraudulento de criptomonedas, perdiendo todos sus ahorros. Tras esa situación, se lo vinculó con el consumo de drogas como marihuana, pastillas y pasta base, lo que habría afectado su entorno y estilo de vida.

Vecinos y allegados lo describieron como alguien que merodeaba el barrio y llevaba una vida desordenada. Aunque se lo señala como colaborador de "Pequeño J", algunos testimonios indican que podría tratarse de un eslabón menor dentro de la estructura criminal. La investigación ahora buscará determinar su rol exacto en los hechos que lo relacionan con el triple crimen.