Sobrevivió un bebé de un año. Sus padres, abuelos y su hermana murieron por monóxido. Parte de la familia había llegado desde Italia un día antes.
Tragedia en Villa Devoto: revelan nuevos detalles y el milagro del bebé
La investigación por la muerte de cinco integrantes de una misma familia en Villa Devoto, en la Ciudad de Buenos Aires, sumó en las últimas horas nuevos elementos clave. Mientras avanzan las pericias para confirmar que se trató de una intoxicación por monóxido de carbono, el caso conmovió por la aparición con vida de un bebé de apenas un año, hallado consciente en la misma casa donde fallecieron sus padres, abuelos y su hermana mayor.
El hecho ocurrió este martes en una vivienda ubicada en Sanabria 3768, entre Pedro Morán y Ricardo Gutiérrez. Tras un llamado al 911, personal de la Policía de la Ciudad y el SAME ingresó al domicilio y encontró sin vida a Demetrio De Nastchokine (79), Graciela Leonor Just (73), su hijo Andrés De Nastchokine (43), la pareja de este, Marie Camille Lalanne (40), y su hija de cuatro años, Elisa.
El único sobreviviente fue un bebé de un año de la joven pareja, quien fue encontrado en una habitación separada. Aunque presentaba síntomas leves de intoxicación, estaba consciente y fue derivado primero al Hospital Zubizarreta y luego al Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, donde permanece bajo observación.
Según la publicación de Infobae, fuentes del caso señalaron que el origen de la tragedia está "en un 99%" vinculado a la inhalación de monóxido de carbono, tal como lo establecieron los primeros informes de Bomberos de la Ciudad y peritos de la Policía Científica. Aún así, la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 48, a cargo del doctor Rosende, continúa con las diligencias para determinar la fuente de la fuga.
Un viaje familiar que terminó en tragedia
La muerte de la familia ocurrió apenas un día después de que Andrés llegara desde Italia para visitar a sus padres junto a su pareja francesa y sus dos hijos. La escena de reencuentro familiar había sido registrada en un video publicado por otro hermano De Nastchokine, donde se los ve abrazándose en el aeropuerto de Ezeiza.
Demetrio, el abuelo, había nacido en Bélgica, era licenciado en Administración y había sido profesor en el Colegio Militar de la Nación, donde también se desempeñó como director de carrera. Además, tenía formación como magíster en Educación y se especializó en gestión de instituciones de nivel superior. Según contó él mismo en una entrevista, era descendiente de una familia rusa que huyó de la Revolución de 1917 y se asentó en la Argentina tras pasar por Yugoslavia y Bélgica.
Andrés, su hijo, era ingeniero de software egresado de la Universidad Católica Argentina. Desde 2014 trabajaba en una empresa tecnológica con base en Génova, Italia, y antes había vivido en Francia e Irlanda por motivos laborales.
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"Muy creyentes, muy queridos"
Vecinos del barrio describieron a los De Nastchokine como una familia "muy querida, muy creyente y siempre presente en las actividades comunitarias". La tragedia dejó conmocionada a la comunidad de Villa Devoto, donde los abuelos vivían desde hacía décadas.
Graciela, esposa de Demetrio, era madre de cuatro hijos. El bebé que sobrevivió es ahora el centro de la atención y el cuidado del entorno familiar, que busca respuestas en medio del dolor por la pérdida.
La causa sigue su curso, mientras los investigadores intentan determinar si hubo fallas en la instalación de gas o mal funcionamiento de estufas o calefones. Mientras tanto, el milagro de un bebé que sobrevivió en medio de la tragedia, se convirtió en el único rayo de luz en una historia devastadora.
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