Escalofriantes detalles del femicidio de la mendocina Fernanda Pereyra

La Justicia sigue investigando para dar con los culpables de este nuevo femicidio que conmueve al país.   La investigación por el crimen de Fernanda Pereyra (26), la sanrafaelina embarazada cuyo cuerpo calcinado fue encontrado en Neuquén hace 12 días, sigue arrojando detalles cada vez más atroces. 

Los investigadores a cargo de la causa creen que la joven fue incinerada durante un ritual dedicado a San La Muerte. El viernes el juez de la causa, Lucas Yancarelli, dictó las prisiones preventivas por seis meses para Luciano Hernández, expareja de la víctima; Osvaldo Castillo, y Diego Marillán como "coautores de homicidio doblemente calificado" por el "vínculo" en el caso del primero y por el "concurso premeditado de dos o más personas". 

  De acuerdo con lo informado, Hernández y Castillo residían en un inquilinato donde se hallaron los santuarios de San La Muerte, y el segundo de ellos tiene tatuajes, tanto el pecho como la espalda que hacen referencia a ese culto.   

"Fernanda ya era víctima de violencia de género, su ex pareja está condenada por haberla golpeado en 2015. Su actual pareja, Hernández, está imputado por haberle dado muerte junto a otra dos personas. Todo el grupo tiene antecedentes, sobre todo de vender drogas en Rincón", detalló José Geréz, fiscal general de Neuquén.

"Profesaban el culto al diablo de una manera atroz" 

En diálogo este miércoles con el programa Te Digo Lo Que Pienso -que se emite de lunes a viernes de 6:50 a 9:00 en Radio La Red Mendoza 94.1-, Geréz aseguró que si bien no es necesario comprobar el móvil del crimen, hay un mix de móviles con relación a su muerte. 

"Ella fue abordada a las 20:30 del 20 de julio por estas personas. Le dieron muerte por apuñalamiento. Eso surge de la autopsia. El cuerpo quedó calcinado, pero se pudieron hacer estudios en su órganos y arrojó hemorragia. Eso habla de arma blanca. También eso es compatible con manchas de sangre que encontramos en el vehículo de uno de los imputados, inclusive en el techo. Eso coincide con un apuñalamiento", expresó el fiscal general.  

Y agregó que "la camioneta, una vez se utilizó para llevar el cuerpo, la lavaron y le cambian las cubiertas".

"La quemaron en una especie de hoguera" 

"Luego la trasladan a la vera de un camino, un lugar utilizado por chacareros, y es allí es donde proceden a quemarla, junto con el bebé que llevaba en su vientre. Lo hicieron en una especie de hoguera. Pusieron palets y ramas que no eran del lugar. Se puso el cuerpo y se roció con combustible, y luego se le colocaron cubiertas, para que derritiera el cuerpo entero", añadió el fiscal.

También aseveró que "se habla de rito satánico", porque "estas personas imputadas profesaban el culto al diablo de una manera atroz. Al llegar al lugar donde viven los imputados nos encontramos con un panorama tétrico que creíamos solo ver en películas. El lugar donde vivían estaba plagado de simbolismo, era como un gran altar. No voy a decir que esto fue el móvil, no sabemos si la mataron por el rito, pero sí es un contexto", añadió Geréz.

También reveló que "otro móvil es el bebé, estaba en disputa, ya que su paternidad está adjudicada por testigos, a otro muchacho. Por suerte tenemos el perfil genético del bebé".

El fiscal recordó además que "la ley penal argentina no exige móvil de ningún crimen. Los móviles son accesorios. La ley solo requiere que se acredite la conducta de homicidio y que la persona entienda la acusación".

Fernanda estaba radicada desde hace unos años en Rincón de Los Sauces, tenía dos hijos y estaba embarazada de 6 meses, el más grande tiene 7 años y vive con su padre en San Rafael, mientras que el pequeño, de 4, se encontraba con ella.  

  El pasado viernes, la joven, a las 20:00 aproximadamente, había estado en la casa de unos familiares pasando la tarde. Según los testigos que se encontraban allí, recibió una llamada, dejó allí a su pequeño y salió. Hasta el momento se supone que Fernanda se juntó con la una dueña de departamentos y le entregó dos mil pesos de adelanto de una deuda que tenía. Después no se supo más nada de ella.  

  Luego de una intensa búsqueda a unos kilómetros de la localidad por la Ruta Provincial 6, camino a Chos Malal, un poblador que caminaba con sus perros por la zona encontró el cuerpo de la mujer embarazada totalmente carbonizado. En ese momento su cuerpo estaba irreconocible como para confirmar oficialmente si se trataba de Fernanda.