El fenómeno de las Salas de Escape llegó a Mendoza

La primera sala de escape de la provincia ha recibido a centenares de jugadores en pocas semanas.

El fenómeno de las Salas de Escape llegó a Mendoza

Por:Miguel García
Redacción Post

Abro los ojos, pero apenas noto la diferencia. La habitación es oscura, y apenas distingo unas pocas formas en la oscuridad. Escucho susurros, pasos que se arrastran, y un sonido de goteo persistente. Mi propia respiración se me antoja un sonido estruendoso.

Doy un par de pasos, vacilante. La madera cruje bajo mis pies. Con los brazos estirados delante, siento algo sólido. Una mesa. Un escritorio. Tanteo alrededor, y mi mano se topa con la manija de un cajón. El interior está vacío… no. Algo metálico… una linterna. Respiro aliviado, y la enciendo. Ahora puedo ver la habitación, y por un momento, quisiera no haber encontrado la linterna. 

No estoy narrando una película de terror ni de suspenso. No al menos, una que vi en una pantalla. Estuve dentro de ella… y fue en Mendoza. Fue en el interior de Enigma, la primera Sala de Escape de la provincia.

Las Salas de Escape son una novedosa forma de entretenimiento, que ya cuenta con miles de adeptos en todo el mundo, desafíos de ingenio que estimulan el pensamiento lateral y el trabajo en equipo.

En diálogo con Daniel Montiel, emprendedor y uno de los fundadores de Enigma, me explicó que abrió las puertas de la Sala de Escape el pasado 9 de julio, y que, en apenas unas pocas semanas, ya han pasado centenares de jugadores por el lugar.

“Las salas de escape son espacios que están creados para que las personas puedan descubrir las habilidades que quizás no saben que tienen o tienen poco elaboradas, pero por sobre todo para potenciar el trabajo en equipo y la comunicación”, contó Daniel.

Según lo que explicó Daniel, el juego consiste en introducir a un grupo de entre 2 y 6 personas en una sala, ambientada con una temática de suspenso y misterio. El equipo tiene 60 minutos para encontrar la salida de la sala, y para ello, debe seguir las pistas y resolver una serie de acertijos que ponen a prueba la agudeza mental de los jugadores.

"Enigma" está en Godoy Cruz, a pocas cuadras del centro mendocino. 

A pesar de la advertencia de que no era posible ganar el desafío en solitario, decidí intentarlo de cualquier manera. “No hay manera que una sola persona pueda resolver la sala. Tiene que ver con los puntos de vista de la persona, porque todos tenemos determinadas habilidades, y tendemos a pensar de una cierta manera. Y eso es fundamental para salir adelante, para encontrar la solución a los acertijos”, me había dicho el iniciador de Enigma.

Sin entrar en detalles de los pormenores de la sala, para no “spoilear” a los que aún no han ido a jugar, puedo decir que lo primero que me sorprendió fue la excelente ambientación del lugar, y lo bien preparados que estaban los acertijos.

Daniel me explicó que, cuando ingresa un grupo de jugadores, normalmente “damos una pequeña introducción, contamos la mitad de una historia, y ellos ingresan a una sala. Cuando el equipo está en la sala, se encuentran con un disparador, es el primer momento donde entienden que tienen que hacer algo, solucionar algo o que haciendo algo, van a llegar a tal objetivo. A través del disparador, vuelven a la historia, se interiorizan y la completan. Es como una película donde ellos mismos son los protagonistas”.

Los jugadores suelen dejar sus mensajes de victoria y promesas de volver.

Tal y como me había anticipado Daniel, me enfrenté a desafíos de lógica e ingenio. En ningún momento fue necesario usar la fuerza, solo la mente. “Durante los sesenta minutos que dura el juego, tu cabeza está en un estado de alerta y de concentración permanente”.

Luego de un rato, y de lograr avanzar un poco, me di por vencido. Tal y como me habían anticipado, la sincronicidad y el trabajo de equipo es fundamental para vencer. Al salir, comenté mi experiencia con Daniel.

“Las salas tienen cierta tensión”, admitió el emprendedor. “Lo que hacemos es exponerte a ciertas emociones, a pleno, y pedirte que pienses. Es una combinación muy puntual a la que te exponemos. Pero en ningún momento proponemos ni hacemos algo que cause miedo. Todo va alrededor de la historia que la persona va siguiendo y generando en su cabeza, que hacen que reaccionen de maneras inesperadas".

“Otro punto interesante, es que ningún equipo es igual. Lo que vos ves un día, en determinado grupo, en la misma sala, después viene otro grupo, y encuentra y hace cosas completamente distintas. Ven otras cosas, piensan distinto, y es muy interesante ver esto. En ese momento de tensión emocional, ves la verdadera naturaleza de la persona, como escucha, piensa y razona”, agregó Daniel.

“La idea detrás de esto es que la gente se permita desenchufarse de la realidad. Durante una hora están viviendo otra realidad, están en el lugar de otra persona. Tenemos dos salas, una con temática de zombies, y otra de un hospital psiquiátrico. Tenemos previsto abrir en el corto plazo una tercera y cuarta sala”, finalizó.

Para quienes estén interesados en ver de primera mano de que se tratan las salas de escape, pueden reservar un turno comunicándose con Enigma, por medio de su Facebook: Enigma Salas de Escape, o en su página web.