Ayahuasca: la polémica droga de moda

Se trata de una sustancia alucinógena natural, que se utiliza contra la depresión, la ansiedad, y los problemas emocionales.

Ayahuasca: la polémica droga de moda

Por: Mendoza Post

La ayahuasca es una polémica sustancia, cuyo consumo ha comenzado a ponerse de moda por distintos lugares del mundo. Se trata de un alucinógeno natural, que presuntamente resulta eficaz para tratar padecimientos neuróticos. En los últimos años, se han puesto de moda una suerte de “retiros” donde se consume la droga al tiempo que se realizan terapias alternativas. En Argentina, está prohibida.

También conocida como “yagé”, la ayahuasca es utilizada desde hace más de 4000 años por los indígenas del Amazonas por sus propiedades medicinales. Se trata de un compuesto que combina dos plantas: la Banisteriopsis caapi y la Psychotria viridis. Es amarga de sabor, de consistencia similar a la de un jarabe, y al consumirla, produce un estado modificado de la conciencia.

La ayahuasca comenzó a hacerse conocida en el año 2001, cuando un empresario argentino radicado en España, Alberto José Varela, creó Ayahuasca Internacional: "El más grande entorno virtual de información, comunicación y conexión entre personas de todo el mundo interesadas en la ayahuasca y que ya han tenido la experiencia", según define en su página web.

Varela conoció la ayahuasca en Colombia. Su hijo de 16 años estaba metido en las drogas y llevaba una vida "muy desordenada", asegura. "Padre de un adolescente preocupado, lo llevé a Colombia y tomó ayahuasca con un chamán y conmigo. A partir de ese momento su vida cambió de una manera increíble", dijo al diario La Nación.

Varela asegura que hay dos tipos de público bien definidos que participan de los retiros: cuadros relacionados con depresión, angustia y ansiedad, y público con problemas ligados a las obsesiones emocionales.

La ayahuasca comenzó a hacerse popular en 2001. 

La sustancia, sin embargo, está prohibida por ley en Francia y Argentina. Por eso, los retiros se organizan en otros países. Para Pedro Horvat, psiquiatra y psicoanalista especialista en vínculos familiares, sociales y pareja, "cuando uno usa una droga, la que sea, desde el alcohol a la ayahuasca, o cualquier tipo de psicoestimulante para provocar una catarsis, hay un montón de pasos intermedios que se saltean y que hacen que aquello que uno llega a decir no produzca un cambio verdadero".

Horvat explica que existen "un montón de inhibiciones, de prejuicios, de temores y ansiedades, que la droga hizo a un lado". Y agrega: "Todos los descubrimientos personales que se obtengan que no sean la introspección pura, o sea sin ninguna clase de estimulante, no produce ningún cambio".

Por su parte, la licenciada en psicología Any Kieger, especialista en pacientes con adicciones, opina que "la oferta de un evento" que en tres días y tres noches desintoxique de su sufrimiento a una persona está fuera de todo razonamiento lógico porque el malestar que nos habita es crónico.