Alerta: estafas en el país con celulares de Mendoza

Las redes sociales estallaron y en los grupos de WhatsApp la advertencia vuela: “No contestes”. En algunos casos, es tarde.

Alerta: estafas en el país con celulares de Mendoza

Por: Mendoza Post

Otra vez el prefijo telefónico de Mendoza vuelve a estar en foco de atención de todo el país por los insólitos mensajes con intento de estafas. Resulta que ahora los estafadores ya cuentan con una base de datos con los miles de incautos que les respondieron identificándose.

Varios medios nacionales y del interior del país alertan por los mensajes con prefijos de nuestra provincia de posibles estafas.

Tanto Infobae, cómo Clarín, diario Veloz y La Gaceta de Tucumán entre otros, ponen en alerta a sus lectores por la ola de mensajes que llegan desde Mendoza por posible robo de datos. Lamayoría de los mensajes tiene características 261 y 263.

“Estamos ante estafadores. Lo primero que decimos desde la Policía, es que no respondan. Casi siempre son mensajes o llamados que realizan desde las cárceles presos, quienes tienen cómplices afuera. Son estafas virtuales”, explica el comisario inspector Reynaldo Farías, jefe del Departamento de Delitos Económicos de la Policía de Córdoba.

En la mayoría de los casos, estos SMS provienen de teléfonos con característica de la provincia de Mendoza (0261).
Por eso, no se descarta el vínculo con bandas locales que tienen antecedentes en delitos virtuales.

También llegaron mensajes con el prefijo 263 perteneciente al Este mendocino

Piden no responder nùmeros desconocidos.

“La verdad que cuando contesté ese mensaje creí que era de alguna amiga que había cambiado el número y me lo mandaba para que la agende. Sólo le contesté “¿quién sos?” Nada más. Luego, como no me respondió pensé que algo raro había”, cuenta Elizabeth D. (33), una joven de la ciudad entrerriana de Colón, según diario Clarín.


Esa advertencia es compartida por los especialistas. Cambian las formas, pero los objetivos siempre son los mismos. “La táctica del SMS es acorde al avance de la tecnología: antes era un llamado telefónico o una visita preguntando por un familiar. También hay estafas vía correo electrónico ofreciendo una herencia o una ayuda económica. Y ante la ambición de la gente, que cree ver plata fácil, se cae en el engaño. Pero el fin, es el mismo, la concreción de una estafa”, había explicado años atrás, ante la aparición de los primeros mensajes de este tipo, el comisario inspector Ariel Avila, ex jefe de la Dirección de Delitos Complejos de la Policía cordobesa, entre otros altos cargos en la Fuerza.

La mayoría de las denuncias son por mensajes con prefijo de Mendoza.


Con los distintos mensajes, los estafadores buscan su bien más preciado: la información. “Van logrando formar una base de datos con llamados o mensajes, debido a la ingenuidad de la gente, que responde sin darse cuenta”, explican los especialistas.

El jefe de Delitos Económicos de la Policía de Córdoba da un ejemplo: “Mandan mensaje y la respuesta ya le ponen nombre y apellido a ese número. De acá a un mes, o dentro de seis meses, se contactan nuevamente con usted y ahí se produce el intento de estafa”.

El procedimiento es bastante fácil: los delincuentes cuentan con una amplia guía telefónica de sus víctimas con nombres, números y a veces hasta el domicilio; datos colectados a través del tiempo con SMS ingenuos como “Hola” o “¿Te puedo llamar?”.

Pasado un tiempo llaman a su potencial víctima por su nombre y comienza el ardid: “Hay varios tipos de estafas, pero las más comunes son los secuestros virtuales y los premios falsos”, explica el comisario inspector Farías.