Me lavé la cabeza con detergente y esto pasó

Luchar contra el cabello graso puede resultar frustrante sino se logran los resultados esperados. Muchas veces parece que la grasa no se va de tu cabeza, para esos momentos de desesperación existe el detergente.

Protegé el pelo con acondicionador y luego unas gotitas de detergente.

Las que sufren de cabello graso saben que no pueden pasar ni un día sin lavarlo. Por esto es que si los tradicionales champú no son suficientes y la grasa se resiste a irse, un remedio muy eficaz es el bicarbonato de sodio.

Si eso sigue sin funcionar, una opción recomendable son unas gotitas de detergente. Considerando que arrasa con la grasa de los sartenes podés darle una oportunidad. Primero aplicá acondicionador a las puntas para protegerlas y después, sin enjuagar el acondicionador, usá un chorrito de jabón del tamaño de una moneda para masajear el cuero cabelludo, según explicó el portal Actitud Fem.

El proceso funciona perfecto. El cabello deja de estar pegajoso y por fin el flequillo dura todo el día sin engrasarse. No se recomienda usar este método frecuentemente porque reseca más el cabello que el bicarbonato, por lo que solo puede ser una opción de emergencia.