Varios autores ponen en duda la eventual existencia del Jesús histórico. Para ellos, la evidencia simplemente no cuadra.
¿Existió realmente Jesús?
¿Existió realmente Jesús de Nazaret, ese que refleja la Biblia? Las discusiones sobre su eventual existencia se reflejan principalmente en los desacuerdos entre los creyentes y los ateos.
Raphael Lataster, profesor de estudios religiosos de la Universidad de Sydney, intentó descifrarlo a través de las páginas del prestigioso diario The Washington Post.
Según Lataster, existen numerosos estudiosos seculares que han presentado sus propias versiones del llamado "Jesús histórico" y la mayoría de ellos son, como biblista JD Crossan asevera, "una vergüenza académica."
A partir de la opinión de Crossan, quien presenta a Jesús como un “sabio”, llegando a Robert Eisenman, que escribió sobre “Jesús el revolucionario”, pasando por Bart Ehrman que lo denominó “profeta apocalíptico”, lo único en lo que los estudiosos del Nuevo Testamento parecen estar de acuerdo es la existencia histórica de Jesús. Pero no más que ello.
“El primer problema que encontramos al tratar de descubrir algo más acerca del Jesús histórico es la falta de fuentes antiguas", asegura Lataster
Y agrega que estas "fueron recopiladas décadas después de los hechos alegados, y todas provienen de autores cristianos deseosos de promover el cristianismo”.
El mismo autor, asegura que los evangelios están “llenos de información mítica y no histórica, y fuertemente editada a través del tiempo”. Para Lataster, los evangelios no logran convencer a los más críticos, ni siquiera en las afirmaciones más mundanas.
Para el mismo autor, son importantes “las fuentes que no tenemos”: “No hay testigos o contemporáneos relatos de Jesús existentes; todo lo que tenemos son descripciones posteriores de acontecimientos de la vida de Jesús por parte de personas que no fueron testigos”.
En la misma dirección se encamina el escritor británico Michael Paulkovich, quien afirma que Jesús de Nazaret fue un personaje mítico que "nunca existió".
Para sostenerlo, se basa en la ausencia de menciones verificables de Cristo en obras de 126 escritores entre los siglos I y III.
Paulkovich dice que Jesús es un personaje ficticio inventado por los seguidores del cristianismo: "Jesús de Nazaret' no era más que una leyenda urbana (o de desierto), probablemente una aglomeración de varios rabinos evangélicos ilusos que podrían haber existido", asevera.
En las obras antiguas que examinó encontró solo un libro que contenía una mención de Jesús: 'Las guerras judías', del historiador romano Josefo Flavio, escrito en el año 95. Sin embargo, Paulkovich dice que esta mención está fabricada: fue añadida más tarde por los editores posteriores, no por Josefo, según informó The Daily Mail.
Incluso en la Biblia, según Paulkovich, Pablo nunca se refiere a Jesús como una persona real. "Pablo no es consciente de la virgen madre, y desconoce cómo nació Jesús y quiénes son sus padres, así como acontecimientos de su vida, sobre los milagros, los apóstoles, la traición, el juicio y la desgarradora pasión. Pablo no sabe ni dónde ni cuándo vivió Jesús, y considera que la crucifixión es una metáfora", recuerda Paulkovich.
También dice que el propio silencio de Jesús corrobora su hipótesis:
Las cartas están echadas, habrá que ver si alguien se anima a refutar estos testimonios o incluso si hay quien pueda aportar alguna evidencia que tercie en favor de la existencia de Cristo. Una interesante discusión para un 24 de diciembre como hoy.



