Trenes y juegos, los grandes pedidos para Navidad

 A pocos días de la llegada de Papa Noel, las jugueterías empiezan a desbordar de padres ansiosos por conseguir el regalo ideal para los más chicos.

El Post recorrió algunos comercios del centro para ver cómo está la oferta y la demanda de juguetes y sobre todo, conocer cuál es el predilecto de este año.

"Las ventas respecto al año pasado están iguales. El movimiento siempre es el mismo: la gente llega siempre a último momento. La última semana siempre se mueve más", nos dice Lucas encargado del sector juguetes de Mix de Compras en plena calle San Martin.

Es una costumbre casi religiosa para el mendocino salir a hacer las compras navideñas a último momento. El centro hoy estaba abarrotado de gente con bolsas que se empujaba por conseguir la mejor oferta y hacia infinitas colas para pagar el regalito de los niños.

Los más pedidos

No es novedad: los juguetes más pedidos son los publicitados en la televisión. El problema está en que no todos están disponibles en las góndolas.

Las trabas a las importaciones dificultan mucho que los dueños de jugueterías puedan surtir sus locales con estos productos.

"La gente busca mucho el juguete que se ve en la televisión, pero no llega por la traba a la importación, entonces prefiere llevarse los productos nacionales que son parecidos y más baratos", nos cuenta Lucas al consultarle por la diferencia de precios.

Es que existe un abismo entre uno y otro. Mientras los juguetes de fabricación nacional arrancan en 50 pesos, los importados "de marca" no bajan de los 700.

Por esta razón, la diferencia de precios es definitorio para los padres a la hora de comprar uno u otro.

En consecuencia, el stock en estos locales se está transformando desde la traba al importado. “Es un 80 por ciento nacional y un 20 por ciento importado”, concluye Lucas.

Si le gusta celeste, que le cueste

Años atrás cuando no existían las complicaciones para importar, el flujo de juguetes era monstruoso: se podían conseguir todos los modelos y a precios módicos. Hoy en día, los compradores deben adaptarse a las nuevas reglas y a esta nueva situación con respecto a lo importado.

El valor del dólar hace que los precios de un importado están por las nubes. "Mucha gente sale corriendo cuando ve cuánto cuesta", dice entre risas Blanca, la histórica encargada de la juguetería Arca de Noé.

Mientras se hacia esta investigación, pudimos ver la excepción a la regla: una nena le pidió a su madre una pequeña caja de Lego de 156 piezas. 

Los 690 pesos que cuesta el producto hicieron que la cara de su madre se desfigurara. Sin embargo, cuando le consultó a Blanca por las facilidades de pago con tarjeta, la mujer se resignó y optó por darle el gusto a su pequeña.

"Lego es muy pedido pero hay poco surtido, lo que hay es muy caro. Tenemos opciones nacionales entonces la gente compara y generalmente se lo lleva porque es más accesible", aclara Blanca ante esa situación.

Clásicos que vuelven para quedarse

No todo el mercado está compuesto de figuras de acción, autos y muñecas. Los juguetes tradicionales están recuperando el terreno que perdieron desde el boom tecnológico protagonizado por consolas de video juegos y tablets.

"También lo tradicional se vende mucho: camiones, muñecas y juegos de mesa", afirma Jorge Duek, encargado de Segal.

También coincide en el importante flujo de ventas, igual al del año pasado, y en que los productos que salen en la tele son lo más pedidos, pero que "cuesta conseguir porque el cupo es menor que el que había años atrás".

Frozen, Sofia y la Doctora Juguetes son las más elegidas para las nenas, mientras que Transformers y los Super Héroes son los favoritos de los varones. Sin embargo, los juegos didácticos, rompecabezas y hasta los trenes están cobrando protagonismo desde hace un tiempo.

"Me encanta que los padres se estén volcando por los juguetes que hagan pensar a los chicos", cuenta encantada Blanca.

La tendencia a elegir productos más tradicionales es evidente. Cuestan menos y entretienen mucho más que frágil muñeco de plástico.

"Este año los chicos de 8-10 años están eligiendo mucho los trenes", concluye la encargada del Arca de Noé.