El hombre que atiende el kiosco de la Peatonal aún padece los efectos de los ansiolíticos que le dio la mujer para robarle.
La víctima de la “Viuda Rubia” sigue durmiendo
El tradicional kiosco de diarios y revistas de Peatonal Sarmiento, frente a la Legislatura, permaneció cerrado este martes por la tarde. Es que el hombre que lo atiende en ese horario aún está bajo los efectos de la sustancia que le dio de tomar la “Viuda Rubia” para robarle, ayer en horas de la tarde.
El empleado del escaparate fue víctima de la mujer que está buscando la Policía y ya cometió, al menos, tres hechos iguales. Se acerca a hombres bares o locales, los seduce o les dice que los conoce, entra en confianza rápidamente, les pone un ansiolítico o somnífero en la bebida que están tomando, y cuando se duermen les roba.
Así le sucedió este lunes por la tarde al hombre que atiende el kiosco de Sarmiento 250. Se le acercó esta misteriosa mujer, alta, rubia, linda, con pantalones rojos ajustados y comenzó a hablarle.
Los encantos de la “Viuda Rubia” rápidamente hicieron efecto. El empleado que estaba tomando una infusión no advirtió cuando la blonda le puso algo en la bebida. Cuando despertó, se dio cuenta que le había robado $800.
No despertó solo. Fue su esposa la que se presentó en el escaparate. Estaba mareado, según reveló una fuente judicial, que agregó: “No pudo declarar anoche porque no estaba en condiciones”.
La misma fuente también contó que esperaban a la víctima durante la tarde del martes para que declare, debido a que había dormido toda la noche, mañana y siesta como consecuencia de lo que le hizo toma la “Viuda Rubia”.
La investigación del caso quedó a cargo del fiscal de Capital Gustavo Pirrello. El magistrado quiere saber, entre otras cosas, qué ingirió la víctima. “Creemos que fue clonazepan, pero el informe del forense determinará con exactitud qué le dio esta mujer”.



