Tras la masacre en Río de Janeiro que dejó al menos 132 muertos, Lula anunció el envío de funcionarios a la ciudad. "Necesitamos un trabajo coordinado que ataque la raíz del narcotráfico sin poner en riesgo a policías inocentes, niños y familias", aseguró.
Lula da Silva: "No podemos aceptar que el crimen destruya familias"
"No podemos aceptar que el crimen organizado siga destruyendo familias", dijo Lula da Silva, presidente de Brasil, en su primera reacción tras la masacre en las favelas del Alemao y da Penha, en Río de Janeiro, que dejó al menos 132 muertos.
A más de 24 horas del operativo policial, Lula anunció que enviará funcionarios a la ciudad para coordinar acciones con el gobernador local. "Esta mañana me reuní con ministros de mi gobierno y les di instrucciones al Ministro de Justicia y al Director General de la Policía Federal para que fueran a Río a reunirse con el gobernador", escribió en sus redes sociales.
El mandatario afirmó que no se puede permitir que el crimen organizado siga oprimiendo a los residentes y propagando drogas y violencia por las ciudades. "Necesitamos un trabajo coordinado que ataque la raíz del narcotráfico sin poner en riesgo a policías inocentes, niños y familias", añadió.
El Operativo Contención dejó 132 muertos en Alemao y da Penha.
Lula recordó además la mayor operación contra el crimen organizado en la historia de Brasil, realizada en agosto, que alcanzó al núcleo financiero de una gran banda involucrada en narcotráfico, adulteración de combustible y blanqueo de dinero. Sobre futuras medidas, afirmó que con la aprobación de la Enmienda de Seguridad, las distintas fuerzas policiales podrán actuar de manera conjunta contra las facciones criminales.
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La Operación Contención, realizada el martes por las policías civil y militar de Río, incluyó 180 órdenes de registro e incautación y 100 órdenes de arresto, con el objetivo de frenar la expansión del Comando Vermelho, una de las mayores facciones criminales del país.
Lula da Silva habló por primera vez tras la masacre en Río.
Horas antes, el ministro de Justicia, Ricardo Lewandowski, aseguró que Lula estaba "horrorizado" por las escenas de violencia en las favelas y viajó a Río para reunirse con autoridades locales. "El presidente quedó horrorizado con el número de víctimas fatales", declaró Lewandowski.
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Por su parte, el gobernador de Río, Cláudio Castro, alineado con el bolsonarismo, negó que Lula haya apoyado las operaciones y lamentó la falta de colaboración federal: "Nos negaron tres veces nuestras peticiones. Todos los días hay un motivo para no cooperar". Castro fue citado por la Justicia para dar explicaciones sobre el operativo el lunes 3 de noviembre.
El Ministerio de Justicia y Seguridad Pública respondió que se atendieron las solicitudes de Río para el despliegue de la Fuerza Nacional, y recordó que la Policía Federal realizó 178 operativos este año en la ciudad, 24 de ellos enfocados en el combate al tráfico de drogas y armas.
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