Se trata del cierre más largo de la historia de Estados Unidos. Ocho demócratas votaron con los republicanos.
El Senado estadounidense votó a favor de levantar el cierre del gobierno
El Senado de Estados Unidos dio este domingo el primer paso para poner fin al "shutdown" más prolongado de la historia del país, que ya lleva 40 días. Con 60 votos a favor y 40 en contra, la Cámara Alta aprobó una votación preliminar que permitirá avanzar con el proyecto de ley para financiar a la administración federal hasta el 30 de enero y comenzar el proceso de reapertura del gobierno.
El acuerdo fue posible gracias al respaldo de un grupo de demócratas moderados, que rompieron con la línea de su partido y pactaron con el oficialismo republicano un compromiso temporal. El entendimiento incluye una cláusula para debatir en diciembre la extensión de los créditos fiscales de la Ley de Cuidado de Salud Asequible, cuyos subsidios vencen el 1° de enero, uno de los principales puntos de fricción que habían trabado las negociaciones.
El impulso decisivo vino de los senadores Jeanne Shaheen, Maggie Hassan y Angus King, quienes lideraron las conversaciones para destrabar el estancamiento legislativo. A cambio de su apoyo, obtuvieron el compromiso de someter los créditos de salud a votación antes de fin de año.
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El acuerdo también contempla revertir los despidos masivos de empleados federales que la administración de Donald Trump dispuso durante el cierre, además de garantizar el pago retroactivo de los salarios atrasados.
"El momento de actuar es ahora", declaró el líder de la mayoría del Senado, John Thune, al convocar la votación inmediata. Sin embargo, el jefe demócrata Chuck Schumer votó en contra, junto con la mayoría de su bancada, a excepción de ocho senadores que se sumaron al oficialismo.
El desenlace fue ajustado y reflejó la creciente fractura interna del Partido Demócrata. Además de Shaheen, King y Hassan, los senadores Tim Kaine (Virginia), Dick Durbin (Illinois), John Fetterman (Pensilvania), Catherine Cortez Masto y Jacky Rosen (Nevada) también cambiaron su voto, aportando el número justo para alcanzar los 60 sufragios necesarios.
La votación se demoró después de que tres republicanos conservadores -Mike Lee, Rick Scott y Ron Johnson- retuvieran sus votos hasta mantener una reunión de último momento con Thune y Trump. Finalmente, los tres se pronunciaron a favor. El senador John Cornyn, de Texas, debió regresar de urgencia desde su estado para emitir el voto número 60, clave para destrabar el proceso.
Impacto del cierre
El shutdown -que comenzó el 1° de octubre- paralizó buena parte del aparato estatal, afectó vuelos en todo el país, puso en riesgo los programas de asistencia alimentaria y dejó a cientos de miles de trabajadores federales sin salario.
Al regresar a la Casa Blanca tras asistir a un partido de la NFL, Donald Trump se mostró optimista: "Parece que estamos cerca de poner fin al cierre", declaró ante los periodistas.
El cierre de gobierno ocurre cuando el Congreso y el presidente no logran aprobar a tiempo las leyes de presupuesto que financian las operaciones federales. Sin esos fondos, las agencias deben detener sus actividades no esenciales y suspender sin paga a sus empleados.
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