La historia visual de un hermoso fracaso empresarial.
Cómo es el cementerio de bicicletas en China
Estos cementerios de bicicletas son el resultado directo del auge y caída del modelo de negocio de bicicletas compartidas en las ciudades chinas. Lo que en su momento fue visto como una solución innovadora y ecológica para el transporte urbano, se transformó rápidamente en un problema de gestión urbana y ambiental.
El concepto de compartir bicicletas se introdujo en China alrededor de 2015, liderado por startups como Ofo y Mobike. Estas empresas, impulsadas por graduados de la Universidad de Pekín, introdujeron bicicletas compartidas sin estaciones fijas, con la misión de hacer las bicicletas disponibles "en cualquier momento y en cualquier lugar".
Este modelo se expandió rápidamente para julio de 2017, había cerca de 221 millones de usuarios de bicicletas compartidas, con la industria expandiéndose a países extranjeros.
La incapacidad de muchas empresas para mantener un modelo de negocio sostenible llevó a la quiebra de al menos treinta y cuatro de las setenta empresas para marzo de 2018.
El caso de las bicicletas compartidas en China es un ejemplo de cómo la innovación tecnológica y los modelos de negocio disruptivos pueden tener consecuencias inesperadas. Demuestra la importancia de una planificación y regulación adecuada, especialmente en sectores que impactan directamente en la vida urbana y el medio ambiente.
