La reconocida obra de Leonardo Da Vinci se encuentra en el museo del Louvre. Le tiraron sopa, pero el cuadro no fue dañado, debido a un acrílico que lo recubre.
Activistas contra el cambio climático le tiraron sopa a la Mona Lisa en París
Un grupo de activistas climáticos evadió a la seguridad del Museo del Louvre y le tiró sopa al cuadro de la Mona Lisa, la obra de arte más famosa del mundo.
La Mona Lisa se encuentra en el Museo del Louvre, en París, y ya había sufrido un ataque de estas características en 2022, cuando un visitante le untó glaseado por todo el vidrio protector.
Activistas climáticos arrojan líquidos a la Monalisa...
— El Club del Arte %uD83C%uDFA8%uD83D%uDCF7%uD83D%uDCDA%uD83D%uDDBC%uD83D%uDD4D%uD83C%uDFBC (@Arteymas_) January 28, 2024
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La obra de Da Vinci atrae a millones de visitantes todos los años para posar junto a la sonrisa más enigmática de la historia. El cuadro mide poco más de 77 centímetros de alto y 53 de ancho.
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La historia de la Mona Lisa no se resume solo en estos ataques vandálicos.
En medio de las masivas protestas del sector agrícola en Francia, dos activistas medioambientales, siempre tan "racionales y equilibradas", le lanzaron sopa a la Mona Lisa exigiendo comida sostenible y saludable". pic.twitter.com/CmeLJJXY9A
— Diego A. Santos (@DiegoASantos) January 28, 2024
En 1911 fue robado por un empleado del Louvre y su parte inferior sufrió un ataque con ácido durante la década de 1950. A partir de este incidente, las autoridades del museo decidieron reforzar las medidas de protección, incluyendo un vidrio que es a prueba de balas. Además, en 2009 una mujer le tiró una taza de cerámica.
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