Cómo preparar un lemon pie sin horno

Con pocos ingredientes y pasos sencillos, esta crema de limón sobre base de galletas es la opción perfecta para un postre fresco, fácil y con todo el sabor casero.

Cómo preparar un lemon pie sin horno

Editó: Tamara Sbardolini

 Hay postres que parecen hechos para quitarnos cualquier excusa de "no tengo tiempo" o "no sé cocinar", y la tarta de limón con galletas sin horno es uno de ellos. Es tan simple que podrías prepararla sin mirar una receta, y tan rápida que, en menos de 20 minutos, ya estará lista para ir al refrigerador y disfrutarla.

Lo mejor es que no necesitas experiencia en la cocina, ni utensilios especiales, ni encender el horno. Con apenas un puñado de ingredientes básicos y unos pocos pasos, vas a lograr un postre que combina el sabor refrescante del limón con la cremosidad de una mousse y el toque crujiente de las galletas. 

Además, es tan versátil que podés prepararla para una merienda improvisada, una reunión con amigos, un cumpleaños o simplemente para mimarte un poco en casa. Lo único que necesitarás será un molde, una cuchara y ganas de disfrutar.

Ver:Cómo preparar un exquisito paté de tomillo y hongos

Ingredientes

 -100 g de galletas tipo María o similares-60 g de manteca derretida-3 huevos frescos-100 g de azúcar común-250 ml de mezcla de leche condensada y leche en partes iguales-Jugo de 2 limones-Ralladura fina de esos 2 limones-45 g de harina de maíz (maicena)

Paso a paso

Armar la base
Moler las galletas con una procesadora o colocarlas en una bolsa y machacarlas hasta que queden molidas. Luego  colocarle la manteca derretida y mezclar hasta que se hayan humedecido las galletas.En un molde para tartas o la fuente que tengas, cubre con la mezcla todo el piso del molde y los bordes, luego llevarla al frezzer.

La base se realiza con galletas. Imagen: lecturas.com

Para la crema de limón

En un bol, mezclá el azúcar, la harina de maíz y 50 ml de la mezcla de nata con leche.

Colocá el resto de leche condensada y la leche en una olla junto con la ralladura de limón. Calentá a fuego medio hasta que esté bien caliente, pero sin que llegue a hervir.

En otro recipiente, batí los huevos junto con el jugo de limón. Incorporá de a poco la mezcla caliente de nata y leche a los huevos batidos, sin dejar de batir para evitar que se cuajen.

Volvé a pasar toda la preparación a la olla y cociná a fuego bajo, revolviendo constantemente, hasta que espese y tenga textura de crema.

Verté la crema sobre la base de galletas ya preparada y llevá a la heladera. Dejá enfriar antes de servir.

Un tip extra: si querés un efecto más elegante, podés hacerla en copas individuales alternando capas de galleta triturada y crema.

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