El postre éxito para las fiestas, fácil  y sin cocción: la torta amor

Una receta fresca, lleva mucho dulce de leche y frutos rojos que no necesita horno.

El postre éxito para las fiestas, fácil y sin cocción: la torta amor

Por: Mendoza Post

Se acercan las Fiestas y la pregunta es siempre la misma: ¿qué servimos de postre que sea rico, fresco y no nos obligue a estar horas frente al horno con 30 grados? La respuesta llega de la mano de una reversión inspirada en la clásica pastelería chilena, pero adaptada a la practicidad que buscamos hoy.

Esta variante de la famosa Torta Amor -conocida por su combinación de texturas crocantes, dulce de leche y frutos rojos- se ha vuelto viral gracias a pasteleras e influencers como Sonita Cantero y Gina Soto. ¿El secreto? Una base firme de galletitas y un relleno cremoso que podés tener listo en minutos.

Consejos para un éxito total:

El frío es clave: Podés servirla bien fría de heladera o darle un toque de freezer para que parezca una torta helada.

Desmolde perfecto: Un truco infalible es forrar el molde con papel film antes de armarla; así sale impecable.

Fruta a elección: Si no conseguís frambuesas, los arándanos o las moras van de diez.

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Ingredientes (Molde de 18 cm) Preparación paso a paso
  • 1 pote de dulce de leche (400 g)
  • 1 paquete de galletitas de agua (o tostadas)
  • 1 pote de queso crema (400 g)
  • 100 cc de leche condensada
  • 250 g de frutillas limpias
  • 100 g de frambuesas (frescas o congeladas)
  1. La base: Triturá las galletitas y mezclalas con el dulce de leche hasta formar una pasta firme.
  2. El armado: Colocá la mitad de esa pasta en un molde desmontable (o budinera) presionando bien.
  3. El relleno: En un bol aparte, integrá el queso crema con la leche condensada y sumá las frutas.
  4. Capas: Volcá la mezcla de crema y fruta sobre la base de galletitas.
  5. Cierre: Cubrí todo con el resto de la pasta de galletitas y dulce de leche.
  6. Frío: Llevá a la heladera por al menos 3 horas antes de desmoldar.

El toque final

Para la presentación, no escatimes: decorá con crema batida, unas frutillas frescas extra o incluso unas hojas de menta para darle ese color navideño tan especial. Es un postre contundente pero fresco, ideal para coronar el brindis.

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