Muchas personas usan lavandina a diario para limpiar, pero un error muy común puede causar problemas de salud y dañar superficies.
Este es el error que todos cometemos al usar lavandina
La lavandina es uno de los productos de limpieza más usados en los hogares argentinos. Sirve para desinfectar, eliminar bacterias y dejar las superficies impecables. Sin embargo, un error muy común al utilizarla puede ser peligroso.
El problema más habitual es mezclar lavandina con otros productos químicos, especialmente los que contienen amoniaco o ácidos, como algunos limpiadores de baños y vinagre. Esta combinación libera gases tóxicos que pueden provocar irritación en los ojos, tos, dificultad para respirar y, en casos graves, daños en los pulmones.
Especialistas en higiene recomiendan usar lavandina siempre diluida en agua, evitando cualquier mezcla con otros limpiadores. Además, es importante ventilar bien los ambientes mientras se utiliza y guardar el envase fuera del alcance de niños y mascotas.
Usar lavandina diluida en agua es la forma más segura de limpiar.
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En resumen, la lavandina sigue siendo un aliado en la limpieza, pero su uso seguro depende de evitar mezclas peligrosas y seguir las instrucciones del envase.
Mezclar lavandina con otros productos puede liberar gases tóxicos.
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