El postre del verano: cheesecake de durazno fresco y sin horno

Con la llegada de la temporada de duraznos, este cheesecake sin horno se vuelve una de las opciones más frescas y fáciles. Una receta práctica para quienes buscan un postre rápido y bien presentado.

El postre del verano: cheesecake de durazno fresco y sin horno

Por: Figueroa

Empieza la temporada de duraznos y con el calor en aumento, los postres frescos vuelven a ocupar el centro de la mesa. Entre ellos, el cheesecake de durazno se convierte en una de las opciones más buscadas gracias a su textura suave, su sabor frutal y, sobre todo, porque no requiere encender el horno.

Este cheesecake se puede preparar en pocos pasos y con ingredientes fáciles de conseguir. Es una receta ideal para reuniones, tardes de merienda o como postre después de una comida. Además, permite una presentación vistosa sin necesidad de técnicas complicadas.

Ingredientes para la base y el relleno

BaseRelleno
2 tazas y media de galletas trituradas sabor a coco3 tazas de queso crema (a temperatura ambiente)
1 cucharada de canela en polvo1 taza de queso mascarpone
Media taza de almendras tostadas y molidasMedia taza de azúcar
3 cucharadas de azúcar1 cucharada de esencia de vainilla
4 cucharadas de almíbar
4 cucharadas de ralladura de limón
2 cucharadas de ralladura de naranja
Un cuarto de taza de jugo de limón
2 sobres de gelatina sin sabor
2 huevos
2 yemas de huevo
Un cuarto de taza de azúcar
Manteca
Media taza de crema de leche
2 tazas de duraznos
1 taza de mermelada

Paso a paso del cheesecake de durazno

1. Preparar la base

Mezclá todos los ingredientes secos en un bowl hasta obtener una masa firme. Colocala en un molde, presioná hasta formar una capa pareja y llevá a la heladera por 20 minutos.

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2. Hacer el relleno principal

En un recipiente integrá el queso crema, el mascarpone y el azúcar. Sumá la esencia de vainilla, el almíbar de durazno, la ralladura de limón y el jugo. Agregá la gelatina previamente hidratada y mezclá todo hasta lograr una textura uniforme. Volcá la preparación sobre la base y refrigerá por 2 horas.

Los duraznos frescos completan la presentación y realzan el color del cheesecake.

3. Preparar la crema de limón

En un bowl a baño maría batí los huevos, las yemas, el jugo de limón y la ralladura. Cociná durante 10 minutos, sumá la manteca y la crema, integrá y dejá enfriar. Luego volcá esta crema sobre la mezcla anterior.

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4. Decorar

Dejá enfriar 30 minutos más, desmoldá y decorá con duraznos frescos y una capa fina de mermelada.

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