El proyecto de Modernización Laboral que firmó este jueves el Presidente Milei, tiene algunas modificaciones impositivas (bajas y derogaciones) que no son del ámibito laboral.
La reforma laboral también viene con bajas de impuestos a los inmuebles
Aunque la reforma tributaria quedó relegada para la segunda etapa de las sesiones extraordinarias, el Gobierno Nacional aprovechó el proyecto de reforma laboral enviado este jueves al Congreso para introducir modificaciones clave en materia fiscal. Entre ellas, un cambio sensible: la eliminación del impuesto cedular que hoy se aplica a las transferencias de inmuebles.
Según especialistas, esta medida podría dinamizar el mercado inmobiliario y aliviar distorsiones que afectan tanto a vendedores como a potenciales inversores.
Es que, durante años, convivieron dos regímenes distintos: el histórico Impuesto a la Transferencia de Inmuebles (ITI) y el impuesto cedular. La diferencia entre uno y otro dependía de la fecha de incorporación del bien al patrimonio.
"Hasta julio de 2024 convivíamos con un doble esquema. Para los inmuebles adquiridos antes del 1° de enero de 2018 se aplicaba el ITI, con una retención del 1,5% del valor de escritura. Para los comprados después, regía el impuesto cedular con una alícuota del 15% sobre la ganancia obtenida", explicó a Infobae Noelia Girardi, gerente de Impuestos de Lisicki, Litvin & Abelovich.
Sin embargo, en julio de este año el Gobierno eliminó el ITI y estableció que los inmuebles previos a 2018 quedarían exentos, mientras que los posteriores continuarían bajo el régimen cedular. Ahora, el nuevo proyecto avanza un paso más y propone directamente la derogación del impuesto cedular.
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Un alivio para inversores y propietarios
Para Sebastián Domínguez, CEO de SDC Asesores Tributarios, la eliminación del impuesto cedular tendrá efectos directos en el mercado: menores cargas impositivas, incentivos para nuevas inversiones y un posible aumento en la oferta de alquileres.
Domínguez remarcó que existían distorsiones vinculadas a las variaciones del tipo de cambio. "Con el impuesto cedular, si alguien compraba un inmueble en dólares, el costo se pesificaba al tipo de cambio oficial y luego se actualizaba por IPC. En un escenario de devaluación, podía haber pérdida en dólares pero una ganancia en pesos, lo que obligaba a tributar igualmente", señaló. Con la derogación, esa situación dejaría de existir.
Además, al no haber impuesto sobre la ganancia, muchos propietarios ya no tendrían incentivos para escriturar a valores elevados, una práctica habitual para "proteger" su costo fiscal futuro.
Más cambios dentro del paquete laboral
Aunque el eje del proyecto es laboral, el texto incluye otros movimientos relevantes en materia tributaria:
Eliminación del impuesto interno a automotores y motos, seguros, telefonía celular y satelital.
Reducción de la alícuota máxima de Ganancias para sociedades, que bajaría del 35% al 31,5%.
Actualización por inflación de los quebrantos generados desde el 1° de enero de 2025.
Ajustes menores en el IVA.
Domínguez explicó que estos cambios se incorporaron ahora porque el Gobierno busca aprobar este paquete antes de fin de año. En cambio, la eliminación más amplia de los "20 impuestos" que el Ejecutivo prometió y la actualización de deducciones en Ganancias -que afectan la coparticipación y requieren mayor consenso político- quedarían para la discusión de enero y febrero.
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