La mina, ubicada en Catamarca, continúa con un proceso de cierre que contará con colaboración internacional. Especialistas japoneses recorrieron el sitio.
Así es el plan de cierre y restauración ecológica de La Alumbrera
El proyecto MARA, que integra los activos de Minera Alumbrera y Agua Rica en Catamarca, avanza con su ambicioso plan de cierre de mina y restauración ambiental en el histórico yacimiento de Bajo la Alumbrera.
La iniciativa, que busca posicionarse como un modelo a nivel nacional, fue recientemente presentada a autoridades provinciales y a una delegación internacional de Japón, en una visita oficial que incluyó recorridos por las principales áreas del complejo minero.
Según informó el medio especializado Panorama Minero, el ministro de Minería de Catamarca, Marcelo Murúa, encabezó la comitiva local que llegó hasta el sitio operado por MARA.
Lo acompañaron funcionarios del área minera y representantes de la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), quienes observaron in situ los avances en las tareas de remediación ambiental.
Durante la visita se destacaron sectores clave del complejo, como el dique de colas, el taller de camiones, la planta concentradora, el mirador de Bajo la Alumbrera y la zona de Bajo El Durazno.
Uno de los puntos centrales fue el programa de revegetación en botaderos, que ya alcanzó una superficie superior a las 119 hectáreas cubiertas con especies vegetales nativas, en línea con las exigencias ambientales vigentes y los compromisos asumidos por la empresa.
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Desde MARA definieron al plan de cierre como un "caso de estudio modelo", al remarcar su enfoque técnico-científico, la implementación de certificaciones internacionales, auditorías externas, y el involucramiento de proveedores locales. Además, el proceso se lleva adelante bajo la supervisión del Ministerio de Minería de Catamarca y de acuerdo con los estándares globales de la firma Glencore, uno de los socios del proyecto.
"Queremos dejar un legado positivo para la provincia", expresó Pablo Lilljedahl, gerente de Relaciones Institucionales de MARA, al poner el foco en la importancia de la fase de cierre no solo como una obligación normativa, sino como una instancia estratégica para asegurar una minería responsable.
El ministro Murúa, por su parte, elogió el trabajo realizado y sostuvo que MARA "es un ejemplo de que nuestro trabajo está a la altura de los mejores lugares del mundo". También subrayó el valor del monitoreo ambiental permanente y la restauración progresiva de zonas en cierre, además del mantenimiento de aquellas áreas que podrían reactivarse si las condiciones del mercado lo permiten.
Cooperación internacional y desarrollo de capacidades
Uno de los aspectos más destacados de la jornada fue la participación de la delegación japonesa, encabezada por el Dr. Yoshitaka Hosoi, asesor senior de JICA, quien expresó su admiración por la magnitud y la tecnología aplicada en el yacimiento. "Esta mina tiene una gran envergadura comparada con otras a nivel mundial. Deben estar orgullosos", sostuvo el funcionario.
La presencia de JICA también buscó afianzar vínculos de cooperación técnica mediante el programa KIZUNA, una iniciativa japonesa orientada al fortalecimiento de capacidades en el sector minero. Durante la visita se analizaron posibles acuerdos para la formación de técnicos argentinos, con becas de posgrado, pasantías en instituciones mineras niponas y capacitaciones en terreno.
El plan de cierre de La Alumbrera, que combina tecnología de punta, enfoque ambiental y cooperación internacional, se consolida así como una experiencia paradigmática dentro de la minería argentina. Para MARA, el desafío no termina con el fin de la producción: comienza una nueva etapa que busca reparar, restaurar y construir un legado sostenible para las próximas generaciones.
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