Según el estudio Burnout 2025 de Bumeran, nueve de cada diez trabajadores argentinos afirma sentirse "quemado". El país lidera el ranking regional por cuarto año consecutivo.
El 92% de los empleados argentinos dice sufrir cansancio extremo laboral
El agotamiento laboral alcanzó niveles récord en la Argentina. Según el estudio Burnout 2025 de Bumeran, el 92% de los trabajadores del país asegura sentirse "quemado" o atravesar el síndrome de burnout, un cuadro de estrés y cansancio extremo vinculado al trabajo diario.
Con este resultado, Argentina encabeza por cuarto año consecutivo el ranking regional de desgaste laboral, superando a Chile (89%), Panamá (79%), Perú (78%) y Ecuador (75%).
"Las organizaciones tenemos un gran desafío: consolidar culturas que fomenten el bienestar de las personas trabajadoras, promoviendo acciones centradas en el talento y su desarrollo", señaló Federico Barni, CEO de Bumeran.com en Jobint.
Más estrés y menos motivación
El estudio, que encuestó a 2.750 trabajadores y especialistas en recursos humanos de cinco países, muestra una tendencia clara: el cansancio no para de crecer.
El 77% dijo haber sentido estrés en el último año, el 73% habló de desmotivación, y el 40% reconoció un agotamiento fuera de lo normal. Además, el 37% confesó que no logra desconectarse del trabajo al final del día.
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Entre los síntomas más comunes, el 53% mencionó falta de energía o cansancio extremo, el 41% negativismo o cinismo hacia su trabajo y el 22% una baja en la eficacia laboral. Solo el 7% dijo no presentar ninguno de estos signos.
Qué hay detrás del burnout
Las causas del síndrome son múltiples. El 24% lo atribuye al trato de los superiores, el 21% a la falta de claridad en las tareas, el 18% a la sobrecarga laboral, y el 12% a la presión del puesto.
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También aparecen el desencanto con los valores de la empresa, la falta de tiempo para cumplir con las tareas y el sentimiento de no estar a la altura.
A esto se suma la extensión de las jornadas laborales: el 45% de los encuestados trabaja más de lo establecido, y dentro de ese grupo, un 15% supera las 50 horas semanales.
Impacto en la productividad
El burnout no solo afecta a las personas. También reduce la calidad del trabajo, genera menos compromiso, pérdida de talentos y conflictos internos. Según el 78% de los expertos consultados, el cansancio crónico baja la productividad y pone en riesgo el rendimiento general de las empresas.
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