Carrasco, condenado por asesinato, está listo para su pelea

El mendocino se enfrentará el próximo sábado ante el ruso Zaur Abdullaev por una eliminatoria para el título ligero de la FIB en Mendoza.

Carrasco, condenado por asesinato, está listo para su pelea

Editó: Ariel Fernández

 Este sábado, el boxeador mendocino Juan Javier Carrasco subirá al ring para enfrentarse al ruso Zaur Abdullaev en una eliminatoria por el título ligero de la FIB (Federación Internacional de Boxeo) en el Arena Aconcagua de Mendoza. Lo que ha generado gran atención en este combate no es solo la importancia del mismo, sino el hecho de que Carrasco, quien está condenado por asesinato, recibió un permiso judicial para quitarse la tobillera electrónica y poder participar en la pelea.

La promoción de la pelea. 

Carrasco, de 32 años, se encuentra bajo arresto domiciliario debido a su condena por el asesinato de su cuñado, Daniel Ahumada. En los días previos al combate, el boxeador expresó en una entrevista su frustración por las dificultades que ha enfrentado para entrenar bajo estas condiciones. "Es injusto. Un mes antes de esta pelea tan importante, me dieron arresto domiciliario y me pusieron una pulsera. Por dos semanas sufrí hostigamiento policial", contó en Radio Nihuil, donde también afirmó que su principal preocupación es su libertad y su familia, más allá del resultado del combate.

La preparación de Carrasco ha estado marcada por limitaciones impuestas por su situación legal. En la entrevista, el boxeador relató que la tobillera electrónica no solo afectó su entrenamiento, sino que también le causó molestias físicas. "Es horrible, me lastima el tobillo cuando corro. Me tuve que poner doble media para que no me golpee en el hueso", explicó. Además, comentó que ha tenido que correr en el patio de su casa y adaptar su entrenamiento a las restricciones de movimiento.

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Carrasco también reveló que ha perdido oportunidades de pelear en el exterior debido a su condena, y reiteró su inocencia en el asesinato de su cuñado, aunque admitió haberlo amenazado. A pesar de las dificultades, Carrasco se subirá al ring con la esperanza de conseguir la victoria y, según sus palabras, "pelear por su libertad".

La pelea contra Abdullaev, un boxeador reconocido a nivel mundial, genera gran expectativa, pero también se ve envuelta en la controversia por el contexto legal de Carrasco.

El llamativo caso de Juan Carrasco en Mendoza

El caso de Carrasco es muy llamativo a nivel nacional, ya que su condena fue confirmada tres veces, pero nunca fue a la cárcel. El hecho que se le imputa es el homicidio de Daniel Ahumada en el 2011. Si bien estuvo preso dos años por el delito de amenazas, no estuvo recluído por el asesinato.

El boxeador fue encontrado culpable por la Justicia en 2016. Sin embargo, estuvo siempre en libertad y recién en agosto de este año le pusieron la tobillera electrónica.

Los jueces de Mendoza que le concedieron a Carrasco la posibilidad de estar en su casa bajo el monitoreo del dispositivo entendieron que se había "resocializado" en base a algunos datos de su vida: desde 2014 que no comete delitos, tiene una familia con dos hijos y nunca dejó de boxear.

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