La muerte de Janet: el novio, y un sicario

Investigan si el asesinato de Janet Zapata fue un crimen por encargo. El novio fue imputado hoy. Capturaron a otro sospechoso. La mataron de dos balazos

La muerte de Janet: el novio, y un sicario

Por:Ricardo Montacuto
Director Periodístico

Los datos se acumulan unos a otros en las últimas horas. Los investigadores del crimen de Janet Zapata (29) trabajan sobre la hipótesis de un asesinato por encargo. La pista trascendió el lunes por la noche a pesar del celo informativo tendido por los fiscales Santiago Garay y Claudia Ríos, quienes debieron trabajar el caso en conjunto a causa de las nuevas disposiciones que rigen el funcionamiento de la investigación penal.

Un testimonio clave aportado por una persona, que también permitió llegar al cuerpo de Janet Zapata ayer por la tarde, sostendría la decisión tomada anoche por el fiscal Garay y por Ríos, para detener a Damián Minati, el novio de Janet. Los fiscales también pidieron la captura de otra persona, llamada Claudio Quiroga (30). Podría ser el sospechoso de haber matado, concretamente, a Janet. 

La hipótesis que sostienen los investigadores hasta ahora, la mejor con la que cuentan, es que Minati habría contactado a Quiroga a modo de sicario para cometer el crimen, por razones que aún no se conocen. Pero que tendrían que ver con algo tan básico como la posesión y los celos. ¿Janet estaba a punto de dejar a su novio, o estaba embarcada en otra relación? Forma parte de las hipótesis. Ahora Minati y Quiroga están detenidos, imputados del homicidio. En el primero de los casos, agravado por el vínculo.

Janet, en una foto de 2014.

Por eso, los fiscales trabajan con todo lo que tienen en el cruce de llamadas de todos los involucrados en el caso. Claudio Quiroga,  el supuesto “sicario”, no tenía ninguna relación previa con Janet. Y los investigadores creen que cobró 15.000 pesos por el "trabajo" de asesinar a la novia de Minati, acusado de instigar y organizar el crimen de su pareja.

El novio

Damián Minati había estado en la tarde del lunes, en la marcha pidiendo justicia y celeridad en la investigación y apenas si podía sostenerse en pie. Lloraba, y evitaba hablar con la prensa. Los familiares y amigos de la chica, y vecinos del barrio Sarmiento donde residía, cortaron el Corredor del Oeste a las tres de la tarde en la rotonda del Corralón Municipal. Horas después, el joven participó de una entrevista entre familiares y amigos de Janet con la vicegobernadora Laura Montero. Cuando le dijeron que Minati había sido detenido, la funcionaria no cabía en sí misma de la sorpresa. “…Pero si se acaba de ir de acá…” alcanzó a comentarle a su informante.

Al medio, Damián Minati, el novio de Janet.

El testimonio que dio la pista sobre el cuerpo y un probable rol de Minati en el crimen, la planificación, o el encubrimiento, inclinaron los indicios a la imputación del novio de Janet, a primera hora de hoy, y horas después detuvieron a Claudio Quiroga. Por eso hablan de un asesinato por encargo, probablemente por motivos pasionales. Suficientes, como para suponer un enemigo capaz de matarla, enterrarla de cabeza en un descampado repleto de basura en El Algarrobal, y cubrirla con cal buscando borrar las huellas.

Ver además: Confirmado: el exnovio de Janet está acusado de homicidio

La policía y los fiscales observaron a Damián Minati desde el primer momento. El lunes, una de las personas que analizó el expediente se sorprendió con un dato. “En todas las referencias que este joven hizo respecto de su novia, con quien salía desde hacía años, hablaba en pasado… ‘Janet era…’ ‘Janet fue…’ y otras frases por el estilo…” Tampoco fue contundente a la hora de señalar el lugar exacto en el que habría dejado –según su versión- a su novia. Con el correr de las horas, se amontonaron pruebas  testimonios y sospechas. Sólo falta el móvil del crimen.

El rol público de Damián Minati fue intenso hasta que fue detenido. En verdad, la familia de Janet Zapata se mantuvo lo más lejos posible de los periodistas, hasta que comprendieron que la prensa podría ayudar a buscar a la chica. Días después de la desaparición y luego de mantener contacto con fiscales, policías, y funcionarios del ministerio de Seguridad, los familiares y amigos de Janet comenzaron a contar cosas. Sin embargo, el martes a la tarde, fue evidente que la familia de Janet creía –hasta ese momento- en las versiones dadas por Minati. De hecho, lo protegieron de las preguntas de los periodistas en la movilización, aunque hizo algunas declaraciones. En un aparte con el Post, el novio de la joven asesinada fue contradictorio y confuso al indicar dónde había dejado a Janet, y rompió en llanto cuando intentaba acertar una respuesta. Pero ello pudo deberse a las tensiones del momento.

Damián Minati terminó la tarde de las protestas por Janet, preso en Contraventores. Sospechoso de haber sido el instigador -por lo menos- del asesinato de su novia por razones que aún no se conocen. Y después le imputaron el homicidio. El momento de su detención fue de película, según cuentan. Fue cuando la fiscal Ríos tuvo la certeza de que el cadáver metido en el hoyo de El Algarrobal era el de Janet Zapata. Dicen que le llamó a Garay y le dijo “detenelo”. Minati estaba conversando con el fiscal. Su detención causó un shock a la familia de Janet.

La cena no existió

El caso se precipitó en las últimas horas, luego de decenas de versiones. Janet había desaparecido el miércoles 21 de setiembre, pasadas las 19:00. Minati fue el último en verla con vida. Contó que había llevado a la chica a una parada de colectivos, porque se encontraría con amigas para festejar el Día de la Primavera. Pero ello no ocurrió jamás.

Versiones posteriores indicaban que Janet había cenado con amigas, o con compañeros de su trabajo, una empresa de cerramientos y portones de la calle Joaquín V. González, de Godoy Cruz. Pero con el correr de los días, fueron desestimadas. No hubo cena ni festejo de la primavera con amigos ni amigas, ni testigos que la hayan visto en ningún restaurante con nadie. “La verdad, es que no sabemos qué pasó con ella, luego de que supuestamente el novio la dejó en una parada de colectivo” dijo una fuente. Otro testimonio hablaba de una supuesta vinculación amistosa y de comunicaciones de Janet con un ingeniero residente en Malargüe, pero ello no fue verificado por la investigación. Sus amigas, además, fueron las encargadas de desmentir las versiones de una supuesta cena de la primavera.

El hallazgo

La versión oficial que se hizo correr ayer respecto del hallazgo del cuerpo de Janet fue la de un hecho fortuito, un hallazgo casual. Pero ello fue relativizado por la noche, cuando el cuerpo de Janet Zapata ya estaba en el Cuerpo Médico Forense. Una persona podría haber visto los movimientos para ocultar el cuerpo de Janet. Y fue la que alertó finalmente a la policía.

El lugar en el que apareció la joven de 29 años es de pesadilla. Una huella perdida en la calle Lavalle de El Algarrobal, antes de la Ruta provincial 24. Esa huella, al lado de una torre de alta tensión, lleva a un lugar en el que una avícola cercana arroja desechos de la industria. “Gente muy humilde suele venir al lugar a buscar comida” contó un testigo de los que ayer estaba en la zona. El terreno está cubierto de plumas por todos lados. “Parecía un salitral… blanco… pero de plumas” dijo la fuente.

Científica y Bomberos, en El Algarrobal.

El sitio es casi inaccesible. El cuerpo de Janet estaba enterrado hacia abajo, y uno de los tobillos sobresalía. Le habían arrojado una importante cantidad de cal sobre el cuerpo con la intención de consumir los restos. Un informante dijo que la acción de la cal y posibles depredadores le habían causado bastante daño.

Anoche, cerca de las diez de la noche, los familiares de Janet empezaron a desfilar entre las fiscalías de Garay y Ríos, y el Cuerpo Médico Forense, para hacerse finalmente de la noticia. Al cierre de este despacho, ya en los primeros minutos de hoy martes 27 de setiembre, los forenses trabajaban sobre el cuerpo de Janet buscando más pistas, tratando de develar la mecánica del crimen. A Janet -madre de una niña de 5 años, trabajadora, buena amiga, joven- la mataron de dos balazos, de acuerdo a lo que pudimos confirmar. Uno en la cabeza, y otro en el tórax. También tenía un disparo en la mano, y había sido muy golpeada.

Las diligencias judiciales de anoche se complicaron, por el estado de shock emocional de la familia de Janet, gente muy unida y querida en su barrio de residencia, el Sarmiento, de Godoy Cruz.

A medianoche se confirmó que el estatus de Damián Minati es el de “detenido”, mientras se reunían elementos para la imputación concretada hoy. El crimen de Janet Zapata, por doloroso que resulte, sirvió además para demostrar que la nueva organización de las fiscalías dispuesta por el procurador Alejandro Gullé puede dar resultados. Santiago Garay en la búsqueda de personas, y Claudia Ríos en Homicidios, trabajaron en conjunto y uno en cada lugar para llegar rápido a los resultados.

El hallazgo de Janet Zapata fue, por contrapartida, un alivio pasajero para la familia de Julieta González (21), la joven desaparecida en Maipú también el 21 de setiembre. Duró poco. Apareció muerta a golpes hoy martes, en un pedregal cercano a la cárcel de Almafuerte, atada de pies y manos. Se cree que la asesinaron a golpes.

Demasiado, para sólo 48 horas.

Julieta González (21) también fue asesinada