El caso del auxiliar judicial de Santa Rosa que fue encontrado abusando de una niña en Rivadavia, y que fue destapado por el Post, escaló a lugares insospechados. La coartada del abusador y el derrotero de la investigación.
Sexo, drogas y escándalo en Mendoza
El viernes pasado, el Post destapó uno de los mayores escándalos vividos en Mendoza en los últimos tiempos.
Se trata del caso de Lucas Fernández, auxiliar de la fiscalía de Santa Rosa que fue encontrado el 25 de enero por la tarde, en Rivadavia, abusando sexualmente de una chica de 12 años en su automóvil.
Finalmente, el hombre fue imputado por el delito de abuso sexual con acceso carnal por parte del fiscal Oscar Sívori.
Esto ocurrió luego de que el funcionario judicial se hiciera de dos estudios puntuales: uno ha sido el peritaje hecho por el Cuerpo Médico Forense (donde se comprobó que las chicas estaban bajo los efectos de la cocaína y el alcohol); el otro es el resultado de lo que dijeron ambas niñas ante la Cámara Gesell.
Las nenas recalaron primero en el Hospital Saporiti, y luego derivadas al Perrupato
Sobre la base de esos informes, se pudo reconstruir qué es lo que ocurrió ese jueves 25 de enero.
Cerca de las 3 de la madrugada, Fernández levantó en la Plaza Italia del departamento de San Martín a las dos chicas de 12 años. Estaba acompañado por un amigo.
Ver además: Lo encontraron abusando sexualmente de dos niñas en Rivadavia
Los cuatro se dirigieron a la vivienda del auxiliar santarrosino y allí habría habido una fiesta sexual en la cual no faltaron alcohol y drogas.
Luego, el amigo de Fernández abandonó al grupo, y el funcionario judicial se dirigió al Carrizal con las dos chicas, donde su suerte ya estaba decidida.
Las niñas estuvieron internadas en el Perrupato
Allí, la situación llamó la atención de una pareja, que decidió denunciar en la subcomisaría de la zona lo que vieron.
Al constatar los dichos de los denunciantes, la policía se encontró con la situación descripta: Fernández teniendo sexo con una de las nenas en el asiento de atrás del auto, mientras la otra se encontraba impávida en el asiento de adelante.
“Patrullando por la zona del murallón hacia zona de Rivadavia habría dos menores y una persona mayor. Al llegar se observa a un masculino y una menor femenina, se bajan las menores entre 12 años en estado de ebriedad”, de acuerdo al parte policial que se labró ese día y al que tuvo acceso exclusivo este diario. Allí se habla de “algún abuso sexual”.
Frente a lo ocurrido, se prevé que Fernández sea procesado —ya se encuentra imputado— por abuso en las próximas horas. Su coartada será la de mencionar que desconocía la edad de las chicas y que incluso pensó que eran mayores de edad.
Lucas Fernández, el presunto abusador
No le servirá de mucho, ya que una de las nenas reveló a médicos del Hospital Perrupato —donde estuvieron ambas internadas— que en más de una oportunidad aclararon su edad ante el auxiliar judicial.
Como sea, mientras se sustancia la causa judicial, se espera una definición puntual por parte de Alejandro Gullé. No es especulación: dicen que los que saben que el procurador sigue de cerca el tema.
