Nieves efímeras

Atravesamos el octavo año consecutivo de crisis hídrica. La retracción de los glaciares continentales y la avidez minera se juntan para que se ponga el foco en la ley destinada a proteger los reservorios de agua. La investigación por los derrames, es el telón de fondo de esta escena.

Nieves efímeras

Por:Jorge Fernández Rojas
Periodista/Analista

Representan el 1 por ciento de la superficie de Mendoza pero que es un reservorio de agua dulce capaz de dotar de agua a todo el territorio provincial.

La discusión pública por el despliegue de los proyectos mineros en el país resurgió el martes 14 en Casa Rosada cuando Mauricio Macri convocó a los sectores involucrados de la actividad. El presidente quería saber por qué no había resultados de esa actividad, acuerdo a sus expectativas. Allí estuvo Emilio Guiñazú el subsecretario Energía en representación de Mendoza.

Río Negro, Santa Cruz, Catamarca y San Juan también mandaron delegados a esa convocatoria. A su vez, estuvieron empresarios y sindicalistas involucrados en este micromundo minero.

Está claro que Mendoza geográficamente es parte de ese escenario y en ese ámbito fue foco de análisis. Fueron dos situaciones evaluadas en el territorio mendocino: la ley de glaciares y la ley 7722.

Once días después Guiñazú repasó algo de lo dicho en esa junta de pedido de rendición de cuentas planteada por Macri, en especial con las leyes restrictivas. Por un lado el funcionario mendocino señaló que no hay proyectos mineros que se vean condicionados por la ley, en especial por lo que se contempla como “ambiente periglacial”. Por otro lado remarcó que la aplicación de la ley 7722 que prohíbe el uso de sustancias peligrosas para la extracción de minerales es respetada y admitió que sólo objeta que los proyectos mineros a estudiar deben estar sometidos a los humores políticos al tener que pasar por la Legislatura.

El ingeniero se preocupó por ponderar los dichos presidenciables a favor de la impronta minera y de la figura de Alfredo Cornejo. “Lo que dijo el presidente del gobernador ante todos los que estábamos allí fue: ‘Cornejo es un gobernador que sabe hacer las cosas y tiene huevos’. Lo dijo después de escuchar nuestras explicaciones sobre la situación en Mendoza”, me detalló.

Guiñazú siguió en su papel de difusor del pensamiento macrista y apuntó hacia la opinión del presidente, volcada con tono de coach de equipo. 

“La minería es la pampa húmeda para el Oeste de la Argentina”, recordó haciendo suyas las palabras del mandatario nacional.

Desde la 7722 a los glaciares 

La idea sobre la aplicación de la norma mendocina que condiciona la extracción de minerales metalíferos, Guiñazú la presentó de este modo para entender las directrices marcadas por la Administración Cornejo.

Cuatro condiciones son necesarias para analizar un proyecto minero en Mendoza: 1)Sustentabilidad para el desarrollo de las comunidades; 2)Generación de empleo; 3)Cuidado del ambiente; y 4) Cuidado del agua.

La discusión sostenida en el sector minero y que preocupa a la Casa Rosada es la traba de los emprendimientos en las minas. Las peleas entre los sindicatos que agrupan a los trabajadores de los proyectos originan paros de las tareas en los espacios de explotación. Eso embraveció a Macri e inmediatamente instruyó al ministro de Trabajo, Jorge Triacca para que interviniera en esos conflictos de competencia entre los gremios involucrados.

Más allá de estos tironeos sindicales que envenenan a Macri, el punto a modificar es el párrafo de la Ley de Glaciares sobre la definición del área periglaciar determinada como todo el territorio de alta montaña que esté afectado por temperaturas bajo cero grado y no necesariamente deben contener hielos continentales o glaciares de escombros.

El compromiso asumido por los consejos federales de ambiente y minería, respectivamente, es llevar propuestas reformistas sobre este aspecto de la norma, siempre de acuerdo a lo descripto por Guiñazú.

Derrames judiciales

A la par, mientras se debate nuevamente la regla para cuidar los reservorios frizados de agua dulce en las cumbres andinas, en los tribunales avanzaron las causas iniciadas por las denuncias de los derrames de agua cianurada en la mina de Veladero en San Juan.

Diego Seguí, Marcelo Arancibia, Enrique Viale y Marcelo Romano (senador electo por Protectora-PI) forman el cuarteto de abogados ambientalistas que integran el llamado Monitoreo Parlamentario Ambiental. Se han consolidado como una usina de demandas contra las mineras y este año cerrarán con un avance en una de sus acusaciones centradas en acción extractiva de la Barrik en San Juan. Ha conseguido con sus planteos varios procesamientos judiciales defendiendo el reclamo vecinal y la aplicación de la ley de Glaciares.

El juez Sebastián Casanello indagará al ex secretario de Minería, Alejandro Mayoral para el 19 de diciembre por su presunta inacción ante el estrépito ambiental en San Juan en septiembre de 2015.

La medida del juez incluye a otras dos personas de la gestión pasada, Sergio Lorusso y Beatriz Domingorena. Pero los mismos abogados denunciantes advierten que el juez porteño continúa investigando a los funcionarios nacionales que han tenido competencia con estos tres eventos contaminantes ocurridos en la mina de Veladero. 

Aseguran que hay que estar atento a los próximos movimientos del magistrado  que está estudiando las acciones del rabino y ministro de Ambiente, Sergio Bergman.

Por lo pronto y concreto el 2017 entonces finalizará con el hombre que instrumentó una política minera durante el gobierno kirchnerista que entre otras cosas se opuso a la ley de Glaciares.