El peligro que acecha en la Subsecretaría de Trabajo de Mendoza

Desde hace años, en el subsuelo del edificio de la institución mendocina se encuentran placas de lana de vidrio en deterioro, elemento cancerígeno.

El peligro que acecha en la Subsecretaría de Trabajo de Mendoza

Por:Ignacio Correa y Torquemada (*)

El edificio ubicado en las intersecciones de las calles San Martín y Rondeau de la Ciudad de Mendoza es diariamente visitado por trabajadores de diversas reparticiones del Estado y particulares.

Lo que muchos quizás no notan, es que el subsuelo del inmueble se encuentra en un pésimo estado.

Lo primero que uno puede observar en dicho espacio, es que las placas utilizadas para el aislamiento térmico del sistema de aire acondicionado se encuentran sin ningún tipo de recubrimiento, además de que las mismas se están degradando al punto de convertirse en un polvillo que es respirado por todo el personal.

Así está el techo de la Subsecretaría de Trabajo

Para confirmar que éste material es lana de vidrio, se concurrió a la Universidad Tecnológica Nacional, donde un Ingeniero de ese organismo, quien solicitó reserva de su nombre, confirmó al Post que el material en cuestión es efectivamente lana de vidrio, e indicó que posiblemente sea de origen mineral, derivada del petróleo.

Esto explicaría la coloración negra del aislante, debido a que generalmente, la lana de vidrio tiene una tonalidad amarilla. En este caso, el color negro lo estaría dando la presencia de coque.

La muestra de lana de vidrio que logró tomar el Post

Lo grave de que este material sea respirado por las personas, es que los aislantes de lana de vidrio están clasificados dentro del grupo 2B según el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC o IARC por sus siglas en inglés), como un material posiblemente cancerígeno.

Por su parte, la Association Advancing Occupational and Environmental Health (ACGIH), sitúa a este material en el grupo A3, caracterizándolo como una sustancia cancerígena para el animal.

Más allá de que estos organismos no confirman en un cien por ciento que la lana de vidrio sea cancerígena en seres humanos, es preocupante que si lo sea en animales, debido a que nuestros organismos reaccionan de manera similar a agentes externos de éstas características.

Otro dato para destacar, y que no es menor, es que la lana de vidrio contiene silicio, material considerado con suficiente evidencia cancerígena en humanos por el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer, según se desprende de la siguiente tabla:

Este dato ha sido confirmado por los doctores Érica Alchapar y Gonzalo Peralta, médicos neumonólogos pertenecientes al Hospital Luis Lagomaggiore de la ciudad de Mendoza, quienes explicaban las enfermedades que puede generar la inhalación de silicio, entre las que se encuentran la silicosis, que puede producir fibrosis pulmonar, e incluso, cáncer pulmonar (mesotelioma pleural); esta patología también predispone a contraer tuberculosis.

Asímismo, los galenos indicaron que los síntomas de la silicosis son tos crónica, falta de aire y pérdida de peso inexplicada y que ésta enfermedad no tiene un tratamiento médico.

La silicosis es una enfermedad que puede producir una discapacidad, y que se puede contraer incluso transcurridos veinte años de haber estado expuesto al mineral.

(*) Especial para Mendoza Post