Elisa Carrió y el ministro de Justicia, Germán Garavano, tienen opiniones distintas sobre desaforar a la ex presidenta y detenerla. Mientras que la líder de la Coalición Civica quiere el arresto, para el funcionario no sería bueno para el país.
Interna en Cambiemos por el desafuero de CFK
El pedido de desafuero de la senadora nacional Cristina Kirchner despertó este miércoles diferencias en el oficialismo y reavivó la interna entre Elisa Carrió y Germán Garavano, luego de que el ministro de Justicia considerara que "no puede ser bueno" que un ex presidente esté preso.
El debate sobre la situación judicial comenzó este martes, cuando el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, confirmó que "Cambiemos tiene tomada la decisión de pedir el tratamiento" en el recinto del pedido de desafuero de la ex mandataria nacional tras la sanción del Presupuesto 2019.
Al ser consultado sobre esa situación, el ministro de Justicia evaluó que "no puede ser nunca bueno para un país" que un ex jefe de Estado "esté detenido o se pida su detención".
"Nunca es bueno para un país que un ex presidente esté detenido o se pida su detención. Por el hecho en sí y porque en principio uno tendería a pensar que no debería haber sospecha de que esta persona se fugue o entorpezca el accionar de la Justicia (Ver más)", subrayó Garavano en declaraciones a radio El Destape.
Sus dichos despertaron la rápida respuesta de la líder de la Coalición Cívica, que lo amenazó con iniciarle un "juicio político".
"Estos dichos de Garavano son una vergüenza para la República y la división de poderes. Puede estar emparentado también con la impunidad de (Carlos) Menem en la Cámara de Casación. Si esto es así es pasible de juicio político", enfatizó la diputada nacional en su cuenta de la red social Twitter.
Carrió y Garavano mantienen un enfrentamiento que en los últimos meses tuvo su pico máximo de tensión cuando la legisladora hizo renunciar a una abogada de la UFI AMIA por estar en desacuerdo con la estrategia del Ministerio de Justicia en el juicio por encubrimiento del atentado a la AMIA.
La ex presidenta tiene pendiente en el Senado un pedido de desafuero y detención que el juez federal Claudio Bonadio hizo el año pasado en el marco de la causa en la que se la investiga por supuesto encubrimiento de Irán en el ataque a la AMIA, a partir de la firma del Memorándum de entendimiento con ese país.
En el medio se mezclan las eventuales aspiraciones de Cristina Kirchner en las elecciones de 2019 y la futura estrategia del Gobierno, que se siente cómodo con las polarizaciones que se han generado con el kirchnerismo en los últimos años.