El juez Bonadio congeló los fondos de Cristina Kirchner, como medida cautelar complementaria de la inhibición de bienes dictada ayer.
Ahora le congelaron las cuentas bancarias
Este jueves, el juez federal Claudio Bonadio ordenó el congelamiento de las cuentas bancarias de Cristina Kirchner.
La medida, confirmada al portal Infobae por fuentes judiciales, se agrega a la inhibición general de bienes dictada ayer respecto de los todos los bienes registrados a nombre de la ex presidente.
Con esta disposición, complementaria de la de ayer, se congelan todos los activos financieros a nombre de la ex jefa de Estado.
El juez ordenó la medida a los bancos donde la ex presidente tiene cuentas según ella misma lo especificó en sus declaraciones juradas. Es por eso que Bonadio mandó oficios a los bancos Nación, de Santa Cruz, Patagonia y Galicia. También le ordenó lo mismo al Banco Central de la República Argentina para que haga cumplir lo decidido en todo el sistema financiero del país.
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Analizan las firmas
Por su parte, el fiscal federal Gerardo Pollicita ordenó hoy periciar los libros contables de la sociedad Hotesur, perteneciente a la familia Kirchner, para determinar la autenticidad de las firmas del ex presidente Néstor Kirchner y sus hijos Máximo y Florencia.
La medida se dispuso porque el fiscal que tiene delegada la investigaicón advirtió "tachaduras" y "enmiendas" y por ello busca ratificar la validez de las rúbricas, informaron fuentes judiciales.
Para ello se dispuso compararlas con las que figuran en registros públicos o en documentación que hubiese firmado el ex Presidente.
Los libros societarios de Hotesur habían sido entregados al juez federal Claudio Bonadio luego de una serie de allanamientos ordenados por él en Río Gallegos, antes de ser desplazado del caso.
La documentación estuvo guardada bajo custodia de Prefectura Naval durante más de un año, mientras el caso estuvo a cargo del juez Daniel Rafecas y se entregó a la fiscalía de Pollicita cuando éste quedó a cargo de la causa junto al magistrado Julián Ercolini.
Allí se detectaron "enmiendas y tachaduras" y por ello el fiscal requirió un análisis de "la totalidad de las inscripciones manuscritas" desde el 7 de noviembre de 2008.
En los libros hay correciones hechas con corrector líquido cuyo contenido se intentará dilucidar y además se buscará confirmar la autenticidad de las firmas de los Kirchner y los demás miembros del directorio.
