Una reunión cumbre fría. Sin presencia de fotógrafos y sin conferencia de prensa. El apuro por entender los números. La resistencia a dejar el poder. Demasiadas similitudes.
Una transición muy parecida a la de 1999
El presidente electo, Mauricio Macri, sorprendió anoche al asegurar que la reunión con Cristina Fernández no fue tan fructífera como se esperaba, en medio de una corta transición donde el nuevo gobierno necesita fervientemente conocer el real estado de los números del país, y ante una mandataria que parece reticente a moverse de su espacio de poder.
Macri anunció que la Presidenta designará un "ministro de traspaso" el 9 de diciembre y sostuvo que la reunión "no valió la pena" porque se redujo al protocolo de la ceremonia del 10 de diciembre, agregó: "Tampoco acordamos una reunión de ministros hasta el 9 de diciembre".
Lo cierto es que esta transición recuerda mucho a la de 1999, contraria a aquella del 89, cuando Raúl Alfonsín invitó a Carlos Menem a recorrer los jardines de la quinta, cuya foto ayer se viralizó en las redes sociales.
Una crónica de Página/12 de la época calificaba en ese entonces la reunión cumbre entre Carlos Menem y Fernando De la Rúa como de "fría".
El presidente entrante y saliente se habían encontrado en Olivos, sin efusividades y pocas sonrisas. De la Rúa le había pedido que se apruebe la ley de coparticipación federal. Se evitó dar una rueda de prensa conjunta y De La Rúa se fue serio, demasiado. Menem lo había atacado previamente en la reunión de gabinete, quejándose por declaraciones del radical en Brasil sobre la claridad de los números. Y, para colmo, Menem nombró un funcionario a último momento: nada más y nada menos que el auditor general de la Nación.
Las coincidencias son asombrosas. Aquí algunos momentos de esa cumbre que se plasman en la nota de P/12.
-Fernando de la Rúa llegó a Olivos serio y se fue más serio, casi como enojado.
-Para el presidente electo es vital demostrar que "el muerto" que le están dejando es peor de lo que podía esperarse.
-Menem respondió a las afirmaciones de su sucesor como sabe: dijo que abre el paraguas por su incapacidad.
-Como consecuencia, el clima de la reunión fue de corrección, pero estuvo lejos de la cordialidad.
-Menem habló sobre la “dureza” de las declaraciones de De la Rúa en Brasil, cuando planteó que les estaban dejando un país desordenado y con un déficit mucho mayor que el que muestran en Economía.
- “Más allá de los adjetivos, yo estoy preocupado por los números”, respondió el radical.
- "No puede ser que se tenga una apreciación diferente sobre las cuentas. ¿Por qué no juntamos a nuestros técnicos para que se pongan de acuerdo?”, propuso De La Rúa.
- De la Rúa continúa empeñado en demostrar que la transición no está linda y ordenada como la pintan, sino que el Gobierno le está dejando una herencia muy pesada.
Salvando las diferencias, las similitudes entre el recambio entre dos gobiernos de diferentes signo político y la resistencia por parte uno que amaba demasiado el poder, son asombrosas.



