Esta semana, Sebastián Sole presentará el alegato en su defensa en el marco de la acusación de “trata de personas”. El Post te cuenta qué dirá.
La polémica defensa del dueño del prostíbulo VIP de Mendoza
Poco a poco, va culminando el juicio que investiga los supuestos delitos de trata de personas y lavado de dinero en el marco del voluminoso expediente del local PymeVIP.
El principal acusado allí es Sebastián Solé, dueño y mandamás del prostíbulo y sobre cuya figura los abogados de la Unión de Información Financiera (UIF) —quienes actúan como querellantes— pidieron esta semana 14 años de prisión.
En ese contexto, el próximo jueves será la hora de los alegatos: allí, los defensores de Solé — Roberto Lavado y Maximiliano Legrand (foto)— intentarán tirar abajo la acusación de marras.
“Vamos a negar la posibilidad de que hubiera habido trata de personas, vamos a decir que a lo sumo se vulneró la ley de profilaxis antivenérea; es lo que ustedes publicaron ya”, anticipó al Post el abogado Legrand.
-¿Por qué dice que no hubo trata?
-Es un delito que exige un elemento específico, que es el transporte de una persona de un lado al otro. Las formas empiezan por la captación, engañando a una persona, el ofrecimiento, la recepción, el transporte y el acogimiento. Es diferente a lo que es la prostitución.
-Es decir que ustedes van a plantear las diferencias entre trata y prostitución.
-Sí, es algo muy claro. Agustina Iglesias Skulg, especialista en el tema asegura al respecto: “La confusión entre la prostitución y la trata de persona no solo banaliza el problema de la explotación de mujeres, sino que impide encontrar herramientas efectivas para combatir el delito (…) Cuando la única herramienta con la que contamos es un martillo, todos los problemas son clavos”.
-¿Cree que logrará convencer al tribunal con ese argumento?
-Yo creo que deberían tenerlo en cuenta. La Cámara de Apelaciones Federal ya lo resolvió y, aunque no es la misma conformación, creo que nos van a prestar atención. Ya dijo esa Cámara: no toda la prostitución es trata.
-¿Por qué en este caso no habría trata?
-En PymeVIP se peleaban por entrar, porque tenían condiciones laborales que no tenían en ningún otro lugar de Mendoza. Era todo muy empresarial el tema. Ni siquiera se permitían alcohol ni drogas.
-¿Van a intentar usar el mismo argumento como atenuante en caso de no tener éxito?
-No vamos a pedir atenuantes, a lo sumo vamos a pedir el mínimo de la pena de trata por una cuestión de rigor. Está claro que, si eso es trata, todo es trata entonces.
-La fiscalía va a plantear que las chicas estaban en situación de vulnerabilidad.
-Ningún peritaje se hizo sobre las chicas para ver si eran vulnerables. Solo un informe de las psicólogas que no fue muy serio. Es idóneo hacer un estudio interdisciplinario para saber si son vulnerables o no.
Por otro lado, mucha gente está en situación de vulnerabilidad, pero necesidades tenemos todos. Como concepto, a la vulnerabilidad amerita darle un estudio más acabado.
-¿Por qué?
-Esa supuesta vulnerabilidad nunca se tiene en cuenta en casos de delitos de otra índole, como robo o similares. Te lo digo porque defiendo a gente que es muy vulnerable y la justicia nunca tiene en cuenta ese tópico.
Aparte, cuando se les dice a las chicas que no tenían capacidad de elegir, se las está discriminando.
-¿Podían elegir?
-Claro que podían elegir, quedó claro en el juicio. Las chicas elegían a quienes esperaban en la recepción, a los “prostituyentes”. Por otro lado, nunca existió sanción alguna por no prostituirse por parte de Sebastián.
-Dejemos de lado la cuestión de la trata, está el proxenetismo, ¿lo admite?
-Hay proxenetismo, lo admito, pero no trata.
-¿Cuál es la pena por ese delito?
-Es una multa de mil pesos y en caso de reincidencia se le quita la nacionalidad al condenado. No tiene pena de prisión.
-¿Contempla la posibilidad de perder con su estrategia?
-Yo opino que podemos perder, pero opino también que la realidad es una sola. Tener un prostíbulo no era un delito en ese momento. Lo dijo incluso un oficial de la policía que es abogado, de apellido Peterini.
-¿Respecto del tema de los abortos?
- Respecto del tema aborto, Sebastián jamás les da dinero a las chicas para abortar, tal cual surge de las escuchas telefónicas.
-Hablando de las escuchas, de allí surge que el prostíbulo tenía protección política y policial.
-No hay pruebas de eso, no había una “red de funcionarios”. Y si la hubiera habido no tenían capacidad de tapar nada.
-Insisto, hay escuchas…
-No son concluyentes, permiten sospechar mucho, no te voy a decir que no. Por ejemplo, Solé era amigo de Cuquejo (Raúl, inspector de la municipalidad de Mendoza) y le pedía información sobre los operativos de inspecciones.
-¿En calidad de qué se daba ese diálogo?
-En calidad de amigos. Solé y Cuquejo se hicieron amigos con el tiempo.
-Volviendo a las escuchas, hay algunas sugerentes de Solé hablando de gente del poder.
-Hay una sola, pero no dice nada al final. Allí Solé le dice a Cuquejo: “Me estoy ocupando, ya hablé con el rey, no con el rey de reyes (el juez Walter Bento), sino con el rey (la entonces mano derecha de Víctor Fayad, un operador). Finalmente, nadie le dio importancia a las gestiones de Solé.
-Cuando dice que habló con el rey, ¿para qué lo hizo? ¿En función de qué?
-Él dice que fue para habilitar su local; si fue para coimearlo, ya no te lo sé decir. Solé quería habilitar cabarets. Y había una forma de habilitar cabarets en el microcentro a través de una ordenanza, que habla de los boliches “Clase A”. Había muchos cabarets, era normal en ese momento.
Colofón
Como se dijo, el jueves hablarán los abogados defensores. Allí, cada uno planteará la estrategia que mejor cuadre para aliviar la situación de sus clientes.
A su vez, el tribunal intentará hacer de este caso un "leading case", algo emblemático.
Los argumentos de un lado y del otro se enfrentarán en un duelo dialéctico que será digno de presenciar. Ciertamente, es poco posible que alguna de las partes ceda en su argumentación, pero así y todo el interés no será menor.
Es que, como dijo alguna vez Tristan Tzara, “la dialéctica es una máquina divertida que nos conduce de una manera banal a las opiniones que hubiéramos tenido de todas maneras.”



