La apertura del tránsito en la Ruta Internacional 7 en Alta Montaña se demora debido a la caída de material de arrastre proveniente de un alud en la zona. Aunque los otros aludes ya fueron limpiados, el trabajo continúa en el kilómetro 1178, en la localidad de Cortaderas.
La situación afectó a un importante número de vehículos, con alrededor de 300 autos detenidos en la zona de Punta de Vacas y otros 200 en Uspallata, con dirección a Chile. Según las autoridades de Vialidad Nacional, se estima que el tránsito no se reestablecerá hasta al menos el mediodía de este lunes 10 de febrero. La persistente caída de material ha dificultado los trabajos, aunque se han logrado avances importantes.
Vialidad Nacional trabaja en la limpieza de la Ruta 7
Los equipos de Vialidad Nacional se encuentran trabajando intensamente en el lugar para limpiar los escombros y asegurar que la vía pueda reabrir lo antes posible. En los últimos días, las condiciones climáticas han empeorado la situación, y la caída de rocas y tierra desde las montañas ha generado nuevos aludes.
Si bien se han podido retirar los vehículos atrapados entre los aludes, los equipos continúan con los trabajos de remoción en la zona afectada. La coordinación entre las autoridades y los operativos de rescate es fundamental para evitar que más vehículos queden atrapados en la ruta.
Vehículos varados debido a la demora en la apertura
La demora en la reapertura de la Ruta 7 ha generado una situación de tráfico tenso, especialmente en los puntos cercanos a Punta de Vacas y Uspallata. Los conductores se encuentran varados, esperando que se restablezca el paso.
Mientras tanto, las autoridades de Gendarmería Nacional recomiendan a los conductores que eviten la zona y que consulten constantemente las actualizaciones sobre la reapertura de la ruta. A pesar de los esfuerzos para liberar la carretera, los trabajos de limpieza continúan, lo que significa que los viajeros deberán tener paciencia mientras las tareas se completan.