Boliches de Mendoza: "Podemos abrir y respetar los protocolos"

Los dueños de locales bailables y los trajadores del sector aseguran que se respetarán más medidas ahí que en las fiestas clandestinas que ya son una constante en la provincia.

Boliches de Mendoza: "Podemos abrir y respetar los protocolos"

Por: Mendoza Post

La llegada del calor y el buen tiempo despertó en los jóvenes mendocinos algo que estaba dormido o que al menos se realizaba en forma reducida: las fiestas clandestinas. Los protagonistas se cansaron de esconderse y ahora están a la vista de todos, se muestran en las redes sociales y convocan a cientos de personas, a pesar de que esto continúe prohibido.

Del otro lado están los dueños de los boliches y los miles de trabajadores que hoy están desocupados en Mendoza por no poder trabajar y que no ven el momento en que se logre una reapertura.

Sobre este tema, Rubi Carsul, uno de los encargados del boliche Olimpo en Chacras de Coria (Luján de Cuyo), se refirió al libertinaje que existe en cuanto a las fiestas clandestinas: "Es un descontrol. Todos saben dónde están. Abrís las redes sociales y te enterás de absolutamente todo, de cómo llegar y a qué hora terminan. No hay ninguna medida de seguridad en el medio", se quejó.

El rubro pasa una situación desesperante.

Sobre si están en condiciones de llevar adelante algún protocolo sanitario por la pandemia, el encargado de Olimpo sostuvo en una entrevista a Te digo lo que pienso, que conduce Ricardo Montacuto por Radio Nihuil, que "se puede trabajar para que todos vuelvan a abrir las puertas. El espacio físico de muchos boliches da la posibilidad de que puedan volver a hacerlo y con mucho éxito, sobre todo los que tienen patio".

  Por último, se lamentó de la dura situación en la que se encuentra el rubro: "Hay unas 10.000 personas que trabajan de esto. El gastronómico, el de las relaciones públicas, el de seguridad y el que sirve los tragos", remarcó. Y cerró: "Desde el Gobierno no nos dan soluciones, recién el año que viene puede que tengamos novedades". 

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Por su parte, Juan Dilon, administrador de Gutiérrez Bar de Ciudad, también fue entrevistado en el programa radial y aseguró que la situación es desesperante: "A duras penas estamos yendo a pérdidas. Gracias al esfuerzo de nuestros empleados que están cobrando ATP y lo poco que vamos sacando", detalló y explicó que solamente están abriendo como restobar durante el día.

Fiesta en Potrerillos con cientos de personas y cero protocolo.

Sobre la posibilidad de reabrir aseguró que cree que "se puede dar mayor seguridad de lo que está ocurriendo en las fiestas clandestinas. Esto es la antesala de lo que va a pasar en el verano. Si hoy abrimos, tenemos capacidad de 450 personas, ahora si vos las separas, que se muevan en el lugar sería mucho más coherente que dejar a la gente que se junte en bodegas y diques".

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"Creo que la gente reacciona ante la imposibilidad de salir. Una vez que se habiliten lugares habilitados, van a elegir volver", finalizó esperanzado. 

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