Lo que parecía una escena de una película de ciencia ficción sucedió en pleno centro de Mendoza. Una extensa fila de personas se prestaron para permitirle a una empresa escanear su iris con un dispositivo a cambio de 50 dólares.
La startup se llama Wolrdcoin, fue fundada por Sam Altman y, según las palabras de Martín Mazza, director de Operaciones para Worldcoin LATAM, "el sistema está construido en base a la biometría y reservamos la identidad de los usuarios en todo momento. Worldcoin nunca va a pedir ni el nombre de la persona, ni su DNI ni nada similar. Al usuario solo le queda su credencial y puede elegir con quién compartirla. La biometría es uno de tantos métodos que creemos que pueden solucionar el problema que planteamos y somos una de tantas empresas que la utilizan. Hoy si vas a un aeropuerto se usa biometría, para acceder a una oficina lo mismo e incluso para activar un celular. Nosotros somos súper cuidadosos y la única forma de crear el código es con el Orb (orbe) y no se pide ningún otro dato personal".
Mercedes Rus.
A partir del fenómeno que se desarrolló en Mendoza durante el mes de agosto y que continúa en diferentes puntos del país, la ministra de Seguridad de la provincia, Mercedes Rus, dijo al Post: "No piden DNI pero tienen algo mucho más valioso, un código de identificación único e inmutable. No hay excusas ni grises. Está claro que el dador de sus datos no tenía al momento de ese contrato toda la información, luego no hay consentimiento informado ni válido. No sólo está en juego la ley nacional de datos personales. Sino también la de defensa al consumidor".
La mierda de worldcoin sigue, pero es interesante como las personas explican como y porqué lo hacen, le agarran la mano al instante. pic.twitter.com/vXEwX5Skh4
Y agregó: "Esto es importante porque el control de la información personal está relacionado con el concepto de la autonomía individual para decidir, cuándo y qué información puede ser objeto de conocimiento y procesamiento. Es el llamado derecho de autodeterminación informativa o libertad informática, derecho personalísimo. En este caso hubo recolección y almacenamiento de datos identificatorios, únicos e irreproducibles. El que no pueda percibir con seguridad suficiente qué informaciones relativas a él son conocidas en determinados sectores, para qué se usara la información recolectada, hasta cuándo se archivara y si estará o no unida a su identificación personal, puede ver cohibida su libertad y por eso entiendo, puede dar un consentimiento viciado. Si la información proporcionada no es suficiente y clara no hay consentimiento informado".
Y finalizó: "Por esto el CCyC de la Nación refiere que están prohibidas las prácticas que subordinan la provisión de productos o servicios a la adquisición de simultánea de otros, art. 1099", y se entiende como práctica abusiva, justo como en este caso, donde el ofrecimiento tenía que ver con una moneda digital a cambio del escaneo del iris".
Te escaneen el iris a cambio de 50 dólares en criptomonedas. Largas colas en las inmediaciones de la plaza San Martín de la Ciudad de Mendoza. La empresa se llama Worldcoin, no está claro con que fin utilizan los datos biométricos. Fuente: Mendoza Post pic.twitter.com/Lwd2T8PTNr
Cabe señalar que hasta el momento 360 mil argentinos se han prestado a esta práctica a cambio de 50 dólares. Argentina está en el top 20 de países fértiles para el desarrollo de estas políticas vinculadas a tecnologías blockchain y crypto.
El pasado viernes, un menor de 14 años recibió un disparo en la cabeza en un episodio confuso. El sospechoso se ocultaba en una vivienda de Las Heras y fue detenido.