La víctima aún no fue identificada. Dos hombres están detenidos y la fiscalía analiza distintas líneas de investigación. Buscan establecer el móvil del hecho y el vínculo entre los involucrados.
Las hipótesis detrás del asesinato en Maipú
La investigación por el homicidio ocurrido en una vivienda de calle Juan Martínez, en el barrio Canciller de Maipú, continúa con nuevos elementos. La víctima fue hallada este martes envuelta en una lona, con lesiones en la cabeza y el cuello. Por el caso fueron detenidos dos hombres, uno de ellos tatuador y dueño del domicilio donde ocurrió el hecho.
Aunque inicialmente se planteó la posibilidad de un conflicto entre hermanastros, hasta el momento no se ha confirmado ningún vínculo familiar entre la víctima y los sospechosos. Tampoco se logró identificar al fallecido, ya que el sistema biométrico no arrojó resultados. La autopsia será clave para determinar la causa de muerte y el tiempo que llevaba sin vida.
Una de las hipótesis que se investiga indica que el episodio podría haberse iniciado varias horas antes del hallazgo del cuerpo. Testigos dijeron haber escuchado gritos al mediodía, y más tarde, cerca de las 19.30 horas, un hombre se presentó en la Comisaría 29 tras haber presenciado una escena sospechosa mientras se encontraba en el lugar para hacerse un tatuaje.
Al llegar, la policía encontró a dos personas fuera del inmueble. Una de ellas tenía manchas de sangre. Con autorización judicial, los efectivos ingresaron a la vivienda y hallaron un cuerpo que habría estado atado, envuelto en una lona de pileta. Se secuestraron elementos que podrían estar relacionados con el hecho, entre ellos una tijera.
La causa está a cargo de la fiscal de Homicidios Claudia Ríos. Los detenidos, de 48 y 29 años, permanecen alojados en la Comisaría 49ª y serán indagados en las próximas horas. El trabajo continúa con recolección de pruebas y toma de testimonios para esclarecer el hecho.
Un antecedente de conflicto familiar
Un episodio ocurrido meses atrás en la misma vivienda reavivó una de las principales líneas investigativas del caso: la existencia de un conflicto entre hermanos por la propiedad del domicilio. El 11 de enero pasado, el tatuador detenido por el homicidio, llamó al 911 al encontrar a su hermano de 38 años durmiendo en el lugar. Según declaró en ese momento, el hombre "se encontraba en situación de calle" y ambos mantenían una disputa por la posesión de la casa.
Ese día, la policía detuvo al hermano y fue imputado por violación de domicilio, aunque recuperó la libertad pocos días después. El 27 de mayo pasado, apenas una semana antes del crimen, se realizó una audiencia en la que se acordó una suspensión de juicio a prueba. Durante la audiencia, el hermano del ahora detenido, aseguró que continuaría reclamando su derecho a habitar el inmueble, el mismo donde se produjo el asesinato.
También te puede interesar: Saquearon una vivienda mientras sus dueños dormían, en San Rafael