La Encuesta de Calidad 2024 revela altos niveles de satisfacción en toda la provincia: 7 de cada 10 usuarios califican positivamente el funcionamiento del sistema.
Transporte público de calidad y sin demagogia
El transporte público es mucho más que un servicio: es una herramienta de inclusión, desarrollo y equidad. En Mendoza, asumimos el compromiso de construir un sistema que garantice accesibilidad, previsibilidad y calidad para todas las personas que día a día eligen movilizarse de manera sustentable.
Los resultados de la Encuesta de Calidad del Transporte Público 2024, elaborada por el Ente de Movilidad Provincial (EMOP) y la Dirección de Estadísticas e Investigaciones Económicas (DEIE), confirman que vamos por el camino correcto: el 71% de los usuarios califican el servicio como "bueno" o "muy bueno". Este nivel de aprobación, lejos de ser un dato anecdótico, es una muestra concreta del impacto positivo de las políticas públicas en movilidad.
No olvidemos que el sistema tuvo fuertes reformas allá por el primer gobierno de Alfredo Cornejo (año 2019), y después de algunas críticas (los cambios al principio nunca son fáciles), hoy el sistema moviliza más del doble de personas con respecto a sus inicios, con mayores recorridos, mejor cobertura y trazabilidad, y en general una mejor valoración, como muestra esta encuesta.
Ver: Quincho: políticos del otro lado del mostrador y la gran estafa a Mendoza
Los principales hitos de aquella reforma fueron:
-Reducción y reorganización de líneas para evitar superposiciones.
-Implementación de un esquema con líneas troncales y alimentadoras.
-Modernización del sistema de información al usuario.
-Nuevas unidades y criterios de accesibilidad.
-Introducción del sistema SUBE como único método de pago.
Hoy el sistema claramente funciona, y la gente así lo expresa. El área metropolitana del Gran Mendoza (AMGM) lidera esta valoración positiva con un 77,9% de calificación positiva, pero también hay avances en zonas rurales y regiones alejadas, donde los servicios de media y larga distancia alcanzan un 64,9% de aprobación, marcando un progreso claro en equidad territorial.
Un punto destacado del informe es la valoración de la información disponible: gran parte de los usuarios reconoce como buena o muy buena la claridad en recorridos, horarios y ubicación de paradas. La App MendoTran se consolida como una herramienta clave para la planificación cotidiana de los viajes, en línea con una gestión moderna, ágil y enfocada en soluciones concretas.
Por supuesto, también escuchamos con atención las demandas ciudadanas. La frecuencia en horas pico, la saturación de algunas unidades, entre otras, son preocupaciones válidas, que marca la encuesta. Pero lejos de ignorarlas, las asumimos como prioridades. Ya estamos trabajando con las empresas concesionarias en mesas técnicas para abordar estos temas, y evaluando nuevas medidas como refuerzos en líneas troncales, incorporación de nuevas unidades, y ampliación de recorridos, para dar rápida respuesta a estas inquietudes.
En cuanto al tema del precio del boleto, hay que tener en cuenta algo que habitualmente no se debate y que se puede resumir en la siguiente frase: cuando el micro no llega, el boleto barato se vuelve excesivamente caro. Hay varias jurisdicciones del país donde el sistema no funciona por hacer demagogia con las tarifas. En Mendoza, el sistema de transporte público sí funciona. Y si bien algunos pueden cuestionar el precio del boleto, es importante recordar que el Estado provincial continúa aplicando un fuerte subsidio por kilómetro recorrido, que beneficia a todos los usuarios. Además, hay sectores clave que reciben un apoyo aún mayor: los estudiantes abonan menos de la mitad de dicho valor ya subsidiado, mientras que docentes, policías, jubilados y personas con discapacidad viajan gratuitamente gracias a programas específicos.
Y si bien aún queda mucho por hacer, el rumbo está claro. En un contexto nacional de alta incertidumbre, Mendoza sigue demostrando al país que es posible sostener un modelo de transporte público planificado, de calidad y con vocación de mejora continua. Porque cuando este tipo de sistemas funcionan, no solo mejora la calidad de vida, sino también se fortalece el entramado poblacional, se protege el ambiente, se dinamiza la economía y se construye ciudadanía. En Mendoza, creemos que una sociedad más justa se debe movilizar cada vez mejor, y en eso estamos poniendo todo nuestro empeño.