Una mujer fue golpeada y arrastrada con el auto por su ex en Guaymallén

La víctima quedó inconsciente y hospitalizada. El agresor fue detenido.

Una mujer fue golpeada y arrastrada con el auto por su ex en Guaymallén

Por: Mendoza Post

Una mujer denunció que su ex esposo la golpeó y luego la arrastró con el auto en Guaymallén. La dejó tirada e inconsciente por lo que debieron hospitalizarla. El agresor está detenido.

Este nuevo caso de violencia de género ocurrió el pasado 9 de agosto  en calle Pedro Molina. Allí, cerca de las 13 Elizabeth, la víctima, había ido a buscar a sus hijos al colegio. La mujer tiene cuatro hijos con su ex marido.

"Él llega y se para en la esquina de la escuela. Le digo que me había sacado la asignación. Se baja del auto burlándose de mí, diciéndome que me había empezado a sacar la asignación y después me iba a sacar la de los chicos. Me pega una piña en el pecho, se mete al auto, me agarra el brazo y me arrastra andando fuerte. Frena, me suelta, frena, me suelta, yo me agarro de la parte de atrás del auto y vuelve a arrancar brutalmente y me caigo boca abajo. Ahí no me acuerdo más porque caigo inconsciente", relató la mujer en Radio Nihuil.

Imágenes ilustrativas.

Según manifestó durante la entrevista, Elizabhet ya realizó 12 denuncias durante 5 años contra su ex marido. Aclaró que aunque la Justicia dispuso una restricción de acercamiento, él logra seguir agrediéndola.

Sobre el atacante, ya pesa una condena de un año de prisión, la cual debía ser cumplida en el domicilio, pero según la víctima, no se mantenía en el interior de la vivienda.

Para finalizar, contó cómo era el infierno que vivió con su esposo: "Me pegaba, después venía con un chocolate y me decía que no me iba a pegar más, que me quería y que no lo dejara. Yo le decía que me iba a ir, que estaba cansada. Él me decía que iba a cambiar pero siempre lo mismo, pasaban dos o tres días y otra vez. Una vuelta me tiró cerca del fuego", recordó.

En otras situaciones de violencia, la mujer contó que "si salíamos juntos, yo tenía que mirar para el piso, no tenía que mirar para ningún lado, no me dejaba. Una vuelta me descompuse en el Mercado Central porque él me iba pegando por la calle".

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