Golpearon a un jugador de "Los Murciélagos" en un intento de robo

A Ezequiel "Junior" Fernándes se le aflojaron dientes tras un golpe y sufrió un corte en la boca.

Golpearon a un jugador de "Los Murciélagos" en un intento de robo

Por: Mendoza Post

Un jugador de Cañuelas FC y de la Selección Nacional de Fútbol para ciegos, "Los Murciélagos", fue víctima de un violento intento de robo en momentos en que se dirigía a un entrenamiento en las instalaciones del Cenard, en el barrio porteño de Núñez.

Se trata de Ezequiel "Junior" Fernándes, de 18 años, jugador de Cañuelas Fútbol Club, quien contó que una persona se le acercó y si bien pensó que era alguien que iba a ofrecerle ayuda para cruzar la calle, de repente comenzó a zamarrearlo, en una presunta intención de despojarlo de sus pertenencias, hasta que le aplicó una trompada que le provocó una herida sangrante y lo dejó conmocionado, caído en la vereda.

"Junior" Fernándes relató lo sucedido al portal InfoCañuelas y recogido por la agencia Noticias Argentinas, manifestando que se trató de "un intento de robo muy violento".

"Me dirigía a entrenar al Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Cenard), eran las 12.45, yo iba caminando con mi bastón por la avenida Crisólogo Larralde. De repente, noto que una persona se me acerca demasiado. Tras un breve contacto, me dio un golpe en la cara", dijo.

"Junior" juega en Cañuelas.

"Me caí para atrás y luego hice unos metros y me desplomé. Unos trabajadores de la construcción que se dieron cuenta de lo que había pasado me ayudaron. Estuve como media hora medio muy aturdido. Una policía me hablaba todo el tiempo. Entonces pasaron unas personas del Cenard que me reconocieron y me llevaron con el médico", agregó. 

Como consecuencia de la agresión, detalló: "Se me aflojaron tres piezas dentales y sufrí un corte en la boca, del que me salió mucha sangre. Me van a hacer una tomografía, porque me cuesta un poco respirar". 

El deportista señaló que se trató de un intento de asalto, aunque el supuesto ladrón no alcanzó a sacarle nada. "La realidad es muy cruda, obvio que esto me desanima, pero no voy a dejar de viajar para entrenar. Mi vida siempre ha sido así. Si me pegan una trompada me tengo que volver a levantar", reflexionó.