La muerte de la pequeña Leonela Rosales entró en un cono de sombra, luego de que la política y la justicia de Santa Rosa decidieran dar punto final "de facto" al impulso de su investigación.
¿A quién le importa la muerte de Leonela Rosales?
Nadie habla. Ni los concejales, ni los abogados, ni el Ejecutivo de Santa Rosa. Nadie.
La muerte de Leonela Rosales es, de repente, un misterio, una especie de tabú. Como si el silencio lograra que ese hecho dejara de existir.
Se trata del fallecimiento por electrocución de la pequeña de dos años, ocurrido el pasado 26 de noviembre en la plaza central del distrito santarrosino de 12 de Octubre, luego de que la nena tocara un poste en malas condiciones.
Un debate incómodo para Norma Trigo
Hubo conferencia, desmentida y hasta testigos “truchos” que intentaron rebatir la versión. “Murió porque se golpeó la cabeza”, dijeron a coro. A Norma Trigo no se le movió un músculo del rostro, siquiera cuando se demostró que era falsa aquella descripción.
Pronto llegaron las revelaciones del Post, que documentaron las advertencias por el mal estado de esa y otras plazas. ¿Se habría evitado la muerte de Leonela si se hubiera reparado en esos señalamientos? Probablemente, sí.
El pedido que podría haber evitado la tragedia
Como sea, en esos días fue creada una Comisión Investigadora para intentar esclarecer las responsabilidades políticas detrás de la muerte de la pequeña y hasta se llegó a plantear la eventual destitución de la intendenta de Santa Rosa.
Sin embargo, algo ocurrió el pasado 26 de enero, cuando la jefa comunal estaba a punto caramelo y los denunciantes decidieron echarse atrás en su voracidad política. Ese día, el Concejo Deliberante le puso punto final a la Comisión Investigadora merced a una movida política pergeñada en los despachos más relevantes de la política mendocina.
En el Concejo Deliberante de Santa Rosa se pasó de la locuacidad al silencio
Para no levantar sospechas, se sostuvo que, en realidad, las decisiones de ese cuerpo quedarían supeditadas a lo que decidiera la justicia respecto de la muerte de Leonela. Como si ya se supiera que nada ocurriría a nivel judicial.
Lo único cierto es que, a partir de ese día, los ediles opositores Antonio Ponce y Marcial Ibarra —respectivos presidente y secretario de la Comisión— perdieron su habitual locuacidad. Algo similar ocurrió con los diferentes actores de esta trama.
Ver además: La muerte de Leonela se podría haber evitado
Como se dijo, en Santa Rosa nadie habla del tema. Ni siquiera la familia de la pequeña fallecida. Por caso, el Post intentó hablar con sus dos abogadas, Celeste De Oro y Valentina Gauna, sin éxito alguno.
Entre otras cosas, este diario quería preguntarles por qué no impulsan una sola medida de prueba desde hace meses.
El despido de 150 empleados muncipales calló todos los ortos debates
“Lo último que se hizo fue el peritaje de diciembre, que demostró que la nena murió electrocutada, luego no pasó nada más”, reconocieron a este diario fuentes de la propia fiscalía.
De pronto, se acabaron las marchas, los “escraches” y los pedidos de justicia. De manera tajante, de un día para otro.
Los rumores hablan de acuerdos “bajo mesa”, de reuniones secretas y negociaciones ad hoc. Pero ojo, solo son rumores.
Ver además: Piden que los concejales destituyan a la intendenta Norma Trigo
“Existió un pacto en el ámbito político, es verdad”, reconoció un concejal opositor al Post, en sintonía con lo publicado el domingo pasado en el Quincho político de este diario.
"Hubo discretas gestiones del gobierno con los opositores internos. Con el Senador Walter Soto, con la presidenta del Concejo Débora Quiroga… un ministro les ha pedido directamente que no la volteen a la intendenta, que no la vacíen de poder… porque hay temor de perder el departamento el año que viene", de acuerdo a lo que reveló este diario.
La sombra de Marcos Nuarte ronda todas las negociaciones
Sin embargo, algo está por ocurrir, alguien sacará "los pies del plato" en las próximas horas. "Hubo cosas que pactó Norma y que no cumplió", reveló una fuente santarrosina al Post.
Es una suerte de "carta en la manga" que volverá a poner sobre el tapete el debate por la destitución de Trigo.
No es que se busque justicia: hay intereses mezquinos detrás. No todos, pero la mayoría. Vencimientos de mandatos y reacomodamientos políticos en ciernes. Mayo es el mes clave.
"La cuestión es que el mandato de Débora Quiroga vence el 1º de mayo próximo y, para ser reelecta como presidenta del Concejo Deliberante necesita aglutinar votos que hoy están divididos, el bloque justicialista está partido en dos y el radicalismo tiene tres votos clave", dijo una fuente de la política santarrosina a este diario.
En las próximas horas, algo ocurrirá que cambiará todo
El mismo informante aportó un dato clave: "No te olvides que, si Trigo es destituida, Quiroga será la próxima intendenta".
Entretanto, en medio de tantas miserias y bajezas, la muerte de Leonela sigue sin encontrar respuestas.
Es que, como dijo alguna vez el novelista Alberto Vázquez Figueroa, "la impunidad vuelve valientes a los cobardes y osados a los pusilánimes, y el día en que cobardes y pusilánimes alcanzan el poder sus sucias babas lo aniquilan todo".
