Perfil y riquezas de un bandido sindical

Quién es y cómo vivía Marcelo Balcedo, el sindicalista detenido hoy en Uruguay. Las fotos de sus autos, su casa, y el dinero. Y el avión que sus amigos tratan de rescatar.

Perfil y riquezas de un bandido sindical

Por: Mendoza Post

Autos de lujo, gustos caros, caballos de carrera, mucho dinero en efectivo, extorsiones, y evasión.

Parecen cortados por la misma tijera. Omar “Caballo” Suárez, Juan Pablo “Pata” Medina, José Zanola, José Pedraza. Poder sindical, “aprietes”, enriquecimiento, negocios turbios, relaciones con el poder. Marcelo Balcedo no es tan conocido como sus otros colegas, ilustres y presos, pero parece cortado por la misma tijera.

El periodista Rodolfo Lara, de la corresponsalía platense de Clarín, cuenta que Marcelo Balcedo -el sindicalista detenido hoy junto a su esposa en Uruguay- es hijo de un antiguo jefe sindical, Antonio Balcedo, “quizá el sindicalista del Estado provincial más lúcido entre los años sesenta y setenta” cuenta.

Balcedo padre mandó a su hijo Marcelo, apodado “El gordo”, a estudiar. Se recibió de ingeniero, incluso hizo un máster en el extranjero, pero el dinero grande lo amasó como sindicalista, y a través de “aprietes” a empresarios que lo denunciaban, sin resultados, hasta que en 2007 una causa por extorsión lo llevó a refugiarse por primera vez afuera del país. Ya era dueño de varios medios platenses, entre ellos el diario “Hoy”. Y dos años más tarde, por una enfermedad de su padre, se convertiría en el titular Sindicato de Obreros y Empleados de la Educación y la Minoridad.

Dos de los vehículos secuestrados. Un Porsche y un cuatriciclo de alta gama.

El “Gordo” Balcedo cultivó además vínculos con el narcotráfico. Su segundo en el gremio, Mario Yebra, fue acusado de tener 15 autos a su nombre, que estaban en poder de la banda rosarina “Los Monos”. Y se cree que el propio Balcedo habría sido o sería uno de los testaferros de aquel grupo narco, según dice el diario La Nación.

El sindicalista y empresario de medios estuvo dos años prófugo de la justicia, en aquella causa de extorsión. A pesar de las pruebas (videos, grabaciones) un fiscal declaró la nulidad de todo, y Balcedo volvió para abrazar más tarde la fe kirchnerista. Apoyó a Cristina en las últimas elecciones.

Hoy, fue detenido en su chacra –muy lujosa- en Maldonado, Uruguay, en el marco de una causa por lavado y evasión. Fue apresado junto a su esposa, luego de las tareas de inteligencia que realizó el Departamento de Investigación de Fugitivos (DIF) de la Dirección General de Lucha Contra el Crimen Organizado e Interpol (DGLCCOeI).

Un Camaro, un Mercedes, una Ferrari, entre los autos secuestrados a Balcedo.

El juez federal platense Ernesto Kreplak había ordenado la detención y captura nacional e internacional de Balcedo y su esposa.

Al momento del arresto, la pareja -que era requerida a nivel internacional desde el pasado 25 de diciembre mediante notificaciones de color "rojo"- se encontraba en la lujosa vivienda esteña, donde se incautaron "varias armas de fuego, municiones, dinero en efectivo, vehículos de alta gama, documentos, documentación personal que se está analizando y joyas", informó el Ministerio del Interior de Uruguay.

Específicamente, encontraron unos 500 mil dólares en efectivo, 6.000 euros y dinero uruguayo, una pistola Glock 9mm, un revólver CTC 38, una réplica de AR 15 Calibre 22 (marca Colt) y gran cantidad de municiones.

Detenido y esposado, con parte de su armamento.

A Balcedo le gustan los buenos autos. Los investigadores incautaron además numerosos autos de lujo, entre los que se destacan una Ferrari, un Mercedes Benz (ambos con patente uruguaya), un Porsche y un Chevrolet Corvette.

Salvo el Porsche del que la esposa era titular, el resto no se encontraban a nombre de Balcedo o su pareja, por lo que se sospecha que los automóviles, el dinero en efectivo confiscado y la propiedad a metros del mar no fueron declarados a la AFIP.

El caso

En noviembre pasado, el juez Kreplak había dictado el secreto de sumario en la causa, que investiga extracciones bancarias de cuentas del SOEME que podrían coincidir con maniobras de lavado de dinero y la adquisición de propiedades y autos de alta gama cuyos titulares no tienen la capacidad contributiva como para afrontarlas.

Parte del dinero secuestrado.

Un informe de la AFIP puso el foco en extracciones de dinero en efectivo sin verificación, entre 2012 y 2013, por más de 53 millones de pesos. 

En el apuro del operativo, en el aeropuerto de Carrasco quedó un avión particular, un Gulfstream IV que Balcedo alquilaba con opción a compra por 60.000 dólares al mes, y por cuyo mantenimiento pagaba 30.000 dólares mensuales. Los amigos de Balcedo intentaban juntar 64.000 dólares para pagar el combustible, y traer el avión a Buenos Aires, para que no sea secuestrado, según informó diario La Nación.

El avión de Balcedo.