Cómo Jerusalén pasó de ser la sede de 16 embajadas a no tener ninguna

Esta semana Donald Trump autorizó que la embajada de EE.UU. a trasladarse a Tierra Santa y despertó rechazo internacional.

Cómo Jerusalén pasó de ser la sede de 16 embajadas a no tener ninguna

Por: Mendoza Post

La decisión de Donald Trump de dar vía libre al traslado de la embajada de Estados Unidos en Israel de Tel Aviv a Jerusalén, anunciada este miércoles, cosechó indignación y rechazo desde todas partes del mundo. Con esta medida, la sede diplomática de máximo nivel será la única ubicada en Tierra Santa. 

Sin embargo, esta decisión tiene su antecedente. Hubo una época en la que tener una embajada en Jerusalén no era tan raro. De hecho, en 1970 había 16, de las cuales 12 pertenecían a países latinoamericanos: Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Panamá, República Dominicana, Uruguay y Venezuela, según un informe de la BBC.

Esta semana hubo protestas en territorios palestinas contra la decisión de EE.UU.

Las cuatro restantes correspondían con tres países africanos -Costa de Marfil, Zaire (la actual República Democrática del Congo) y Kenia- y uno europeo: Países Bajos, considerado entonces como el principal aliado de Israel en el Viejo Continente.

Para ese entonces, se habían producido tres conflictos armados entre países árabes e Israel: el más reciente, la Guerra de los Seis Días, en 1967, permitió a las Fuerzas de Defensa Israelíes tomar el control de Tierra Santa, que estaba dividida desde 1948.

Por qué se fueron de Jerusalén las embajadas

Las primeras embajadas en retirarse de Jerusalén fueron las de los países africanos, que cerraron tras una reunión del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) realizada en Argelia en 1973.

Allí se exigió una "retirada inmediata e incondicional de Israel de todos los territorios ocupados" para manifestar su solidaridad con el pueblo palestino y se comprometió  a "ayudar a Egipto, Siria y Jordania a liberar sus territorios ocupados, por cualquier medio".

La decisión de Trump generó rechazo internacional.

Tras varios enfrentamientos bélicos entre Siria y Egipto e Israel, 18 estados africanos rompieron relaciones con ese país. 

Las embajadas se reabrieron en 1980, pero en Tel Aviv.

Una ley polémica

La salida de las restantes embajadas presentes en Jerusalén se produjo en 1980 tras la aprobación de una ley con rango institucional, mediante la cual se declaraba que "Jerusalén, completa y unida, es la capital de Israel".

La legislación generó una fuerte respuesta de la comunidad internacional e, incluso, fue motivo de disputa entre los gobiernos de Israel y de Estados Unidos.

En agosto de 1980 el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución que desaprobaba la controvertida ley porque "buscaba alterar el carácter y estatus de Jerusalén".

Además el texto llamaba a "aquellos estados que han establecido misiones diplomáticas en Jerusalén a retirar esas misiones de la Ciudad Santa".

Trump había anunciado en junio que no reconocía a Jerusalén como la capital de Israel.