"Nuestros bisabuelos potabilizaban el agua con vino"

Ángel Mendoza, decano de enólogos, lamentó el mote de bebida no saludable con el que se le pretende aplicar el impuesto al vino y recordó cómo los inmigrantes utilizaban esta bebida.

"Nuestros bisabuelos potabilizaban el agua con vino"

Por: Mendoza Post

La polémica por el impuesto al vino que anunció el ministro de Hacienda de la Nación Nicolás Dujovne puso en un lugar incómodo a los políticos y empresarios mendocinos, ya que el funcionario nacional advirtió que tomó esa decisión por recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, al enmarcarse como bebida no saludable, junto con otras bebidas alcohólicas y azucaradas. 

Ángel Mendoza, decano de enólogos, aseguró el viernes en diálogo con el programa Te Digo lo que Pienso, de Radio La Red Mendoza, que se trata de una bebida saludable. 

“Hablar del vino y la salud es mi obligación, porque el vino me permitió hacer una familia, un lugar en la vida y un proyecto vitivinícola. De manera que tengo que ser un gran defensor del valor alimenticio y fisiológico del vino", advirtió Mendoza. 

Ángel Mendoza

Y aseguró que la premisa de que el vino es una bebida saludable, está respaldada por "los 8000 mil años de historia" y "las civilizaciones mediterráneas". 

"El vino tiene componentes naturales que ayudan a la digestión" 

"Es un aliado de la alimentación mediterránea basada en poca carne, más cereales, más pescado y eso define en la Organización Mundial de la Salud un estilo de vida sano donde aparte de controlar las raciones de esos alimentos, comparte 200 mililitros de vino por día y 50 de aceite de oliva", aseguró el decano. 

Y si bien aseveró que "siempre hay un concepto lógico de moderación", el vino "tiene componentes naturales que ayudan a la digestión", y explicó que al favorecer la liberación de jugos gastricos, "tenés una mejor manera de digerir las carnes, en especial las rojas, es decir que el tinto es un aliado de las rojas y en particular el blanco es de los mariscos, porque al ser alimentos tan alcalinos necesitan de esa acidez importante del vino blanco para neutralizar algunas micotoxinas o toxinas que a veces tienen los moluscos en su corta vida de estantería". 

Ángel Mendoza también enfatizó en el hecho de que "la única manera de haber hecho oasis en los desiertos del Oeste argentino se debe a un grupo de inmigrantes, a la visión de algunos gobernantes de la época de haber dado pie a una expedición mediterránea a que viniera a trabajar en la viña. Los viticultores son dueños del paisaje mendocino y vos cada vez que se te cae una finca y la tenes que erradicar por barrio estás rompiendo un equilibrio muy particular que un día nos va a traer un dolor de cabeza porque era una manera inteligente de poder cubrir los aluviones de verano".

"Nuestros abuelos hasta desinfectaban el chupete de los nietos con vino" 

Para el especialista del vino, "un vinito de verano, un 'sodeadito' y un cubo de hielo, es mucho más sano que una gaseosa con ácido fosfórico que es el culpable de que en el siglo XX se haya extendido la osteoporosis, el cáncer de huesos, a cuenta de la tremenda disolución que hace el calcio y magnesio y que elimina por la orina".

"El vino es una bebida de placer, pero cuando se consume responsablemente",  advirtió Mendoza.

"Es una pena que vengan a decir que es una bebida nociva” 

Y además recordó que "para los abuelos de nuestros padres, era la bebida más segura que tenían. Ellos mezclaban vino con agua para potabilizar el agua, tenían una crisis histórica de cólera y es curioso, porque la manera de controlarla es mezclar el agua con vino tinto. Por ejemplo, los romanos cruzaron los Alpes, hicieron la conquista con el secreto de potabilizar el agua con un litro de cabernet, en ese caso se llamaba viña dura. Eso no lo podían hacer los vikingos, con lo cual ellos le ganaron hasta que los vikingos por su fortaleza lo revirtieron, pero ese fue el secreto que les permitió conservarse en esa contra lucha".

"Nuestros abuelos hasta desinfectaban el chupete de los bebés con vino porque era la manera más segura", agregó. 

“Lo más importante del vino ya lo dijo René Favaloro, en el año 2000. Dos vasitos de vino le ayudaban a romper el atontamiento de miocardio, le ayudaba a ser vasodilatador en la cirugía del corazón. Es una pena que vengan a decir que es una bebida nociva”, añadió Mendoza.