Ocurrió en Ucracia. Un jugador realizó una actuación digna de la peor crítica, y ante la indiferencia de todos, se levantó como si nada. A contrapartida, el Alemania hubo un gran gesto de fair play.

Simuló un golpe retorciéndose como un gusano

Por: Mendoza Post

En el fútbol ucraniano un jugador simuló un golpe retorciéndose de dolor, exagerada y sobreactuadamente, y cuando vio que nadie pasaba factura de su pésima actuación, se levantó como si nada y siguió jugando.

La triste escena, que avergonzaría a los grandes actores dramáticos, la protagonizó Oleksandr Noyok en el partido que disputaron  Metalurg Donetsk ante Karpaty Lviv. La moraleja es clara: si te duele de verdad, no te movés.

En la Bundesliga, todo lo contrario

Para contrastar la acción ventajera de Noyok, vamos al polo opuesto. En Alemania, el jugador del Borussia Mönchengladbach, Max Kruse, interrumpió un prometedor ataque de su equipo para tirar la pelota afuera a causa de que un rival había quedado golpeado en la otra punta de la cancha. Su equipo ganaba 1 a 0 y podría haber estirado la ventaja, pero Kruse eligió la solidaridad. El gesto, por supuesto, recibió la ovación del estadio.