Hoy se vota en el jury por aceptar o no una sanción que al propio Cornejo le pareció insuficiente. La Corte está partida, y la UCR y el PJ definen hoy.
Duro test para el gobierno en el caso Sidoti
Últimamente, el Jury de Enjuiciamiento de Mendoza, el órgano que decide sanciones a los miembros del Poder Judicial, se parece más a un cónclave de cardenales para elegir al Papa, que a un tribunal de Mendoza. Al menos, por el misterio y las operaciones previas a cada votación.
Hoy a las 9:30 de la mañana, el Jury de Enjuiciamiento se reúne para decidir – finalmente- la sanción o el perdón al fiscal Fabricio Sidoti. Lo juzgan por su actuación en el caso Ayelén Arroyo, aquella jovencita asesinada por su padre abusador en setiembre del año pasado, luego de haberlo denunciado en la fiscalía de Sidoti.
La conducta del fiscal fue denunciada con dureza por el propio gobernador Cornejo, de hecho, fueron el ministro de gobierno Dalmiro Garay y el subsecretario de Justicia Marcelo D’Agostino quienes promovieron el juicio político del fiscal.
Lo que está a consideración hoy es un acuerdo entre el Procurador Alejandro Gullé, el jefe de todos los fiscales, instituido por la Constitución como acusador; y la defensa del fiscal Sidoti, para aceptar todos los cargos que le imputaron -errores que derivaron en el asesinato de Ayelén Arroyo- en un proceso de juicio abreviado, a cambio de una sanción intermedia, prevista en la ley de jury modificada en diciembre del año pasado. Hasta ese momento, el jury podía destituir o archivar los casos, pero no dictaminar una sanción distinta.
El nuevo instrumento permite sanciones intermedias, hasta seis meses de suspensión. El acuerdo fue considerado insuficiente incluso por el gobernador Alfredo Cornejo, con lo que el radicalismo ha quedado entrampado: si votan el acuerdo al que arribó Alejandro Gullé, dejarán en “off side” al gobernador. Y si no lo votan, corren el riesgo que entre el peronismo y parte de la Corte “salven” al fiscal, como pudo haber ocurrido en la primera votación.
Hay un problema más. Hay jueces de la Suprema Corte que se oponen a hacer un “acuerdo” por una sanción intermedia, porque la ley nueva no lo contempla específicamente, y según su criterio, no cabría aplicar el Código Procesal Penal, algo que la ley en realidad sí habilita. El abanderado de esta postura es el juez de ADN radical Alejandro Pérez Hualde, junto al peronista Julio Gómez. En el gobierno no se sorprendieron. Pero si el acuerdo es rechazado, el que quedará mal parado es el procurador Alejandro Gullé, quien además cree sinceramente que el accionar de Sidoti no fue todo lo incorrecto que se le imputa. Gullé camina en el duro equilibrio de ordenar el Ministerio Público Fiscal, y los fiscales están muy sensibles con el Caso Sidoti. De hecho, todos dicen que una gran mayoría habría actuado como el fiscal acusado. Sidoti, cabe recordar, no detuvo al padre de Ayelén Arroyo, una facultad que tenía, cuando la chica lo denunció por abuso. Su padre la mató por venganza y ahora está preso en Boulogne Sur Mer. El miedo de Ayelén era claro y palpable en la declaración que hizo al fiscal y que este medio publicó.
Además de esta pelea jurídica, hay una política. El PJ intenta que el gobierno pague el costo político del “cambio de postura” y quieren dejar pegado al gobernador en el acuerdo con Sidoti, a quien el mismo peronismo y la Corte quisieron salvar. Y el radicalismo, que pasó buena parte de la calurosa tarde de ayer “rosqueando” para llegar a una postura, no pudo definir la situación. Por eso, los radicales del jury se reunirán hoy a la mañana, antes de la sesión, para ver si pueden decidir qué hacer: aceptar o rechazar el acuerdo, aceptar o rechazar el monto de la sanción parcial, o proponer algo distinto.
Algunos radicales están más proclives a prestarle la oreja a la Corte, y no quedar “pegados” en la decisión que se tome, cualquiera sea. Pero da la impresión que ninguna postura tendrá costo cero. Ni salvar, ni condenar, ni darle un “chirlo” de dos meses y medio de suspensión sin sueldo, como acordaron los abogados de Sidoti y la Procuración, aunque Gullé está confiado en sacarlo adelante. Nada es gratis. Habrá costo social y político, que lo pagarán o Gullé, o el gobernador, o los legisladores radicales, o la Corte, o el PJ, o todos, si no toman una decisión de “sentido común”.
El temor de la UCR es que los peronistas “logren salvar” a Sidoti hoy, a la hora de votar. Por eso se inclinan por la sanción parcial propuesta por Gullé, aunque al igual que a Cornejo, no les gusta el monto de dos meses y medio, por escaso. De todos modos, sólo un inocente total o un marciano -que deben tener mejores códigos que los seres humanos- podría creer que el Procurador acordó con Sidoti la sanción intermedia sin un guiño previo del gobierno. Por eso esta mañana los radicales se van a reunir, con jefes de bloque además y el ministro Dalmiro Garay, para definir el voto.
Los peronistas, en tanto, tendrán su propio “pre jury” esta mañana, una hora antes de la sesión. Seguramente entre ambas reuniones circularán mensajes y emisarios.
Los jueces de la Suprema Corte, en tanto, se reunieron ayer y allí tampoco las posturas estuvieron unificadas. “Pérez Hualde y Gómez votarán en contra del acuerdo. Pedro Llorente y Valerio votarían en favor de la propuesta de Gullé. Lo mismo que Mario Adaro. El voto de Nanclares, no lo sabemos” se sinceró una fuente oficial. Algunos de los jueces no dijeron en la reunión qué votarían hoy. El “voto-sorpresa” que podría complicar las cosas en contra del acuerdo es de la camarista Alejandra Orbelli, quien reemplazará al juez Omar Palermo. El resto del “jury” pondrá a sus titulares, incluyendo legisladores “estrella” como Juan Carlos Jaliff, Lucas Ilardo, Patricia Fadel, y Eduardo Bauzá.
La sesión del Jury será a las 9:30, en este escenario complejo. Sin embargo, más allá de cualquier resultado de la votación y de las especulaciones políticas, hay algo que no va a cambiar. Ayelén Arroyo fue a la justicia a pedir ayuda, y luego, fue asesinada por su padre. ¿Quién se hace cargo de ello? Sidoti dijo en el aire de “Te digo lo que pienso” el año pasado por La Red Mendoza 94.1 “…fue un resultado imprevisible…”
Y después, aceptó los cargos a cambio de una sanción menor. Ahora, es el jury de catorce legisladores y siete jueces de la Corte, el que decide.