El procurador de Mendoza habló sobre la prisión domiciliaria del cura abusador del Próvolo y advirtió: “No somos un órgano de venganza sino de justicia”.
"Queremos que Corradi llegue vivo al debate"
El Procurador de la Corte de Mendoza, Alejandro Gullé habló de la prisión domiciliaria del cura Nicola Corradi, que está acusado de abuso sexual a niños del Instituto Próvolo.
Dijo que un informe médico indica que la salud del sacerdote se ha deteriorado. “Nos interesa que llegue vivo al debate”, dijo. Y alegó: “Pretendemos tener una condena satisfactoria”.
Gullé explicó a Radio Mitre Mendoza: “Corradi está en prisión domiciliaria, a mediados de febrero tiene la audiencia de prisión preventiva y en un mes y medio más podemos estar pidiendo la elevación a juicio de la causa”.
Corradi, en silla de ruedas
Y añadió: “La prisión domiciliaria de Corradi, así como en un principio nos negamos, está sostenida en un informe del Cuerpo Médico Forense que decía que él estaba apto para permanecer en Penitenciaría. Pero hoy tenemos un informe que dice todo lo contrario, se ha deteriorado de una manera pronta, ha adelgazado 7 kilos en los últimos días, está en una carrera vertical muy complicada”.
Para el procurador, “hay informes médicos que dicen que no puede seguir en la condición de encierro en la que está. Y como a nosotros nos interesa francamente que llegue vivo al debate, porque pretendemos tener una condena ejemplificadora y además porque no somos un órgano de venganza sino de justicia…".
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Gullé culminó explicando que "entonces vamos a tratar de resguardar su integridad física para que llegue a debate y podamos ventilar públicamente lo que ha hecho este sacerdote. Aunque sea una de las pocas condenas en el mundo sobre este tipo de actitudes llevadas adelante por sacerdotes”.
"Pretendemos tener una condena ejemplificadora", dijo Gullé
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