Corrupción en Petrobras: los negociados que complican a la empresa

En esta tercera parte de la saga de notas que explican la crisis en la mayor compañía brasilera, te contamos cuáles fueron las inversiones que se transformaron en un claro ejemplo del desfalco que pone en jaque a Brasil

Corrupción en Petrobras: los negociados que complican a la empresa

Por:Juan Soldano Deheza (*)
Corresponsal en Brasil

En la primera entrega presentamos el origen del mayor escándalo de corrupción de la historia de Brasil. Luego contamos cuáles fueron los primeros indicios de la corrupción. Y ahora mostramos algunos ejemplos de inversiones que se transformaron en ejemplo del inmenso desfalco que sufrió la mayor empresa brasilera.

A lo largo de la segunda mitad de la década pasada, Petrobras encaró un proceso de expansión de su área de refino, con la construcción de la Refinería Abreu e Lima en Recife.

 La refinería Abreu e Lima

Esta refinería, que tenía una inversión inicial estimada en más de 2.000 millones de dólares y un plazo de 4 años para ser terminada, fue incrementado sus costos de construcción hasta multiplicarlos por diez, y doblando su tiempo de construcción.  

Varias de las mayores empresas de ingeniería y construcción de Brasil participaron en la construcción de este mega emprendimiento

El área internacional por su parte negoció la compra del 50% de una refinería en Pasadena, Texas, apta para procesamiento de petróleo pesado a una trading belga de petróleo (Astra Oil) pagando aproximadamente U$S 150 millones, siendo que Astra había comprado en U$S 50 millones toda la refinería un año antes.

El contrato establecía que Petrobras debería realizar una serie de inversiones para actualizar la refinería y que caso estos no fueran efectuados en tiempo y forma debería comprar la parte de su socia con más multas. Sólo que según varios documentos internos de la empresa estas condiciones no fueron comunicados por el área actuante (Direccion Internacional) al Comité Ejecutivo de la empresa, integrado entre otros por la entonces ministra de la Casa Civil y actual Presidente, Dilma Roussef, la que aprobó la compra con desconocimiento de las condiciones contractuales pactadas. 

La compra de una refinería en Texas le trajo muchos problemas a Petrobras

Como Petrobras incumplió su parte fue demandada por su socia, perdiendo las diversas instancias de arbitraje. La cuenta final fue una pérdida cuyo valor oscila entre U$S 500 y U$S 1000 millones incluyendo las honorarios de abogados, multas e intereses, dependiendo de la fuente que se considere. 

La Refinería se encuentra operativa y funcionando, pero Petrobras reconoce que será imposible recuperar las pérdidas

Adicionalmente se compró una refinería en Okinawa, Japón en U$S 50 millones la que estaría totalmente obsoleta técnicamente y requeriría una fuerte inversión para ser operativa.

Cabe destacar que los procesos de retro-fit de las operaciones industriales de Petrobras fuera de Brasil suelen ser realizadas por las subsidiarias extranjeras de las empresas constructoras brasileñas que realizan servicios para la empresa dentro del país.

Buena parte de estos contratos han sufrido objeciones por parte del Tribunal de Cuentas que ha reclamado de sobre precios y problemas de ejecución.

Debe destacarse que todo lo relatado afecta exclusivamente a algunas áreas específicas de Petrobras, particularmente las áreas Internacional, ingeniería y suministros.

En los últimos días aparecieron una serie de denuncias de una gerente de alto nivel de la empresa que reclama por denuncias no atendidas sobre casos de corrupción en operaciones en la sucursal Singapur donde hay mails enviados a las autoridades de la empresa con estas denuncias, las que no habrían sido atendidas.