Nervioso por haber perdido ante el Wolfsburgo, Pep abrazó al cuarto árbitro por la alegría de una conquista.
El insólito festejo de Guardiola que sorprendió a todos
Guardiola estaba tenso en un partido difícil ante el Schalke 04 en el Allianz Arena y sorprendió a todos.
Su equipo comenzó ganando 1-0 con gol de Robben y Pep lo festejó con locura y abrazándose con el árbitro. Reacción inusual en él.
Lo cierto es que la alegría duró poco. El Schalke terminó empatando el encuentro y el Bayern no jugó nada bien.