No todo es ensalada: ¡3 recetas imbatibles con tomate!

Se viene la temporada de una verdura excelente. Cómo prepararlos.

No todo es ensalada: ¡3 recetas imbatibles con tomate!

 Ahora que llega la época fuerte del tomate, te propongo tres recetas fáciles para que elabores platos saludables con esta genial hortaliza, ideales para los próximos días de calor.

Y es que el tomate es una de las principales fuentes de vitamina C durante los meses de verano. Esta vitamina, unida a carotenoides como el licopeno (pigmento que le da su color rojo característico), hacen de este producto una fuente indispensable de antioxidantes, muy beneficiosos para nuestra salud. 

Sorprendé a tu familia y amigos con estas opciones súper divertidas y saludables.

1. SOPA DE TOMATE CON HELADO DE MENTA

Ingredientes: Para la sopa: Medio kilo de tomates redondos “maduros”, 1 pepino, 1 cebolla, 1 diente de ajo, medio litro de agua, aceite de oliva, sal y pimienta.

Para el helado: 1 manzana verde ácida, 2 cucharadas de caldo de verdura, 2 claras de huevo, aceite de oliva, 1 puñado de hojas de menta, ralladura de medio limón, sal, pimienta y media cucharadita de azúcar.

La sopa de tomate: El primer paso es lavar bien todos los vegetales. Pelá la cebolla y el ajo para posteriormente picarlos bien pequeñitos. A continuación, sofreílos en una sartén con un poquito de aceite de oliva. Mientras, pelá los tomates y cortalos en cuadraditos para añadirlos a la sartén con el ajo y la cebolla. Hay que ir removiendo la mezcla para que se vaya formando una salsa con el tomate hasta que esté medianamente espeso. Reservar. Aprovechá para pelar el pepino, cortarlo en cubos pequeños y mézclalos con la preparación anterior. Si deseás que quede una textura fina, colocar todo en la licuadora y dejar bien liso.

Para el helado: Rallar la manzana sin piel y mezclar con el caldo de verduras y el huevo, que se ha hervido previamente para que sea duro. Triturá bien todos los productos para que quede una mezcla homogénea. A continuación, añadí las hojas de menta picadas junto a la sal, la pimienta, el azúcar, el jugo de limón y la ralladura. Cuando todo esté bien mezclado agregá el aceite y vuelve a remover. Ya sólo falta meterlo en el congelador e ir removiendo de vez en cuando para evitar que se cristalice. Debe quedar una mezcla cremosa, además de deliciosa.

Presentación: verter la sopa de tomate bien fría en un cuenco y añadir el helado torneado con la ayuda de una cuchara. También podés espolvorear un poco de olivas negras deshidratadas para dar otro toque de color, o poner unas hojas de menta. 

Tips: Si querés pelar los tomates con facilidad, hacerles un corte en forma de cruz en los extremos, sumergirlos en agua hirviendo y después ponerlos bajo chorro de agua fría.

2. TOMATES GRATINADOS

Ingredientes: 1 kilo de tomates grandes, 50 gr. de pan rallado, 6 cucharadas de aceite de oliva, 1 diente de ajo, 1 cucharada de perejil picado y 200 gr. de queso parmesano rallado. Este plato, está cocinado con una base de verduras y legumbres y pertenece a los platos de la cocina vegetariana.

Primeramente, lavamos bien los tomates y los cortamos en dos mitades. Los salamos y los dejamos escurrir durante media hora. Mientras los tomates escurren, preparamos una mezcla con ajito picado, perejil, queso parmesano, pan rallado, aceite de oliva. Con la mezcla anterior rociaremos los tomates cortados. Gratinamos los tomates en el horno durante 40 minutos a 200ºC, o hasta que los tomates estén bien dorados. 

Tips: Estos tomates se pueden consumir con carnes de todo tipo y pescados a la plancha, aunque como plato principal pueden ir acompañados de un poco de queso mozzarella horneado ligeramente junto con los tomates. El agradable sabor y aroma que desprenden cuando los horneamos hacen que este plato sirva como entrada o perfecto acompañamiento.

3. RISOTTO DE TOMATE, QUESO PARMESANO Y ALBAHACA

Ingredientes: 4 tomates “Perita”, 50g. de manteca, 1 cebolla roja mediana, 1 taza de arroz redondo (basmati), 1 ¾ taza de caldo de verduras, 1 hoja de laurel, 1 puñado de hojas de albahaca, 5 cucharadas de queso parmesano rallado, sal y pimienta negra a gusto.

Paso a paso: Pelar los tomates, quitarles las semillas y cortalos en daditos. Picar la cebolla y cocinar en una cacerola baja con la manteca hasta que quede transparente. Agregar el arroz y rehogar el conjunto durante un par de minutos. Es el momento de agregar el caldo, la hoja de laurel. Cocé a fuego lento durante 15 minutos, sin parar de remover. Incorporá ahora el queso rallado, la albahaca picada y el tomate. Seguí cocinando 5’ a fuego suave, añadiendo caldo si fuera necesario. El risotto debe quedar bien cremoso, y el grano de arroz debe quedar “entero”. Salpimentar a último momento (cuidado que lleva queso) y servir bien caliente. 

Tips: El risotto es un plato que tiene como ingrediente protagonista al arroz. Se dice que su origen se localiza en la zona noroeste de Italia, concretamente en Piamonte y Lombardía, donde la presencia de cultivos de arroz es muy abundante. El truco para obtener un risotto bien cremoso consiste en no parar de remover el arroz en ningún momento. Al hacer esto, provocamos que el arroz se desprenda del almidón que contiene, lo cual ligará la salsa y nos dará como resultado un arroz muy cremoso.

DATOS NUTRICIONALES DEL TOMATE

Calorías: 23 kcal. /100 gr.

Proteínas: 0.8 gr. / 100 gr.

Grasas: 0.2 gr. / 100 gr.

Hidratos de carbono: 3.5 gr. / 100 gr.

Índice glucémico (IG): 30