¿Qué tener en cuenta al elegir un plazo fijo?

¿Qué tener en cuenta al elegir un plazo fijo?

Por: Mendoza Post

Antes de solicitar plazo fijo por primera vez es importante conocer de qué se trata y por qué puede resultar conveniente. Un plazo fijo es una operación financiera a través de la que un banco a cambio de dejar cierta cantidad de dinero inmóvil por un tiempo determinado, te da una rentabilidad que se percibe en forma de dinero. O sea: al constituir un plazo fijo de cierto monto por, por ejemplo, dos meses, vas a recibir un porcentaje de interés cuando termine ese plazo. El tiempo que se dejará el dinero inmóvil se define al inicio de la constitución de este tipo de depósito.

Al momento de contar con una cierta cantidad de dinero y no saber en dónde es mejor invertirla es cuando las personas comienzan a ver la posibilidad de constituir un plazo fijo. Este tipo de depósito es muy popular dada su rentabilidad asegurada y la mínima incertidumbre que presenta. En el momento en el que una persona se decide a constituir un plazo fijo, plantea cuánto dinero invertirá y por cuántos días quiere dejar esa plata inmóvil dándole intereses. Una vez que finalice este período de tiempo existe la posibilidad de seleccionar desde el momento uno que el dinero se deposite en la caja de ahorros propia, o que el plazo fijo se renueve automáticamente. Todo depende de qué se quiera hacer con el monto invertido.

Tips para elegir un plazo fijo

Antes de solicitar un plazo fijo hay que tener en cuenta varias cosas. En primer lugar chequear con cuánto dinero se cuenta para invertir y estar seguros de que no necesitaremos utilizarlo durante el tiempo en el que decidamos constituir el plazo fijo. Eso es realmente importante dado que la plata invertida no puede tocarse durante el período de tiempo definido. Una vez que eso esté claro es que podemos comenzar a investigar un poco más acerca de intereses, comisiones, importes y demás.

Las personas que solicitan un plazo fijo lo hacen, por lo general, por dos motivos que se entrecruzan: para no tocar un cierto monto de dinero por un período de tiempo y poder usarlo en otro momento, y para que esa plata genere intereses que se traducen en algo más de dinero adicional a lo que se invirtió. En esa línea es que es importante visibilizar la rentabilidad que generará la constitución de un plazo fijo en tal o cual banco. Cada entidad financiera brinda diferentes montos de intereses que pueden consultarse online, por teléfono o de modo presencial, si así lo preferís. Este punto es esencial y hay que tomar en cuenta que el interés será mayor cuanto mayor sea el monto invertido, y cuanto más extenso sea el período de tiempo que elegimos dejar esa plata inmovilizada.

Además no hay que olvidarse de chequear el monto mínimo y el máximo de inversión en un depósito a plazo fijo, dado que eso es lo que indicará si este tipo de inversión nos sirve o no nos es funcional. De estar pensando en realizar un plazo fijo en una entidad financiera en la que no tenés una cuenta abierta, tenés que tomar en cuenta que para constituirse vas a tener que contratar una con ese banco elegido. Por eso es que es interesante investigar cómo son los precios y las comisiones que pueden cobrar por la realización de cualquiera de estos trámites o la solicitud de los servicios. Eso también ayudará a decidirse por un banco u otro.

¿Qué otros beneficios se asocian a un plazo fijo?

Dependiendo de la entidad financiera en la que se lo solicite, hay diferentes beneficios asociados a la constitución de un plazo fijo. Algunos bancos dan puntos por poner dinero en un depósito a plazo fijo. La cantidad de puntos otorgados depende del dinero total invertido y la cantidad de tiempo que seleccionamos para dejarlo inmóvil.

Un plazo fijo es una buena manera de hacer rendir los ahorros, ya sea un monto pequeño o más grande. Es fácil y seguro y podés hacerlo desde la comodidad de tu casa a través del home banking del banco elegido.