Dos ex agentes de la DEA estadounidense (Administración para el Control de Drogas, en español) revelaron oscuros secretos del narco Pablo Escobar, muerto en 1993.
Según revelaron Steve Murphy y Javier F. Peña al diario New York Post, Escobar tenía en su poder cartas de madres que le ofrecían a sus hijas para que tuviera sexo con ellas.
Además, el capo colombiano tenía un armario en el que guardaba lencería de encaje y "juguetes sexuales, incluso vibradores".
Los ex agentes cuentan detalles de la operación de búsqueda en contra de Escobar y en la que participaron activamente.
Además, los hombres confesaron que estuvieron presentes en "La Catedral", la cárcel que construyó el narcotraficante con lujos y con sus guardias de confianza.

Juan Pablo, el hijo de Escobar, confirmó en su libro las fiestas de su padre.
Según dicen, a su arribo encontraron que el capo tenía dibujos animados (satíricos) sobre Estados Unidos y juguetes sexuales.